La visita de la consejera de Movilidad, María González, a la estación de autobuses ‘Reina Doña Urraca I de León’ llegó precedida por la polémica generada a cuenta de los «excesivos» logos de la Junta en el edificio, que han sido criticados por diferentes asociaciones y que provocaron una protesta el pasado sábado ante la estación.
Sin embargo, la responsable autonómica de movilidad calificó este lunes la polémica como «malintencionada» y defendió que León «tiene que quedarse con lo positivo» porque la ciudad tiene ahora una estación «ejemplar» a la altura de «lo que merece». «Invertimos aquí porque creemos en ello», aseguró, en referencia a los casi 7 millones que ha costado reformar el edificio, inaugurado justo hace un mes por la Junta.