La Cámara de Comercio acerca el coche eléctrico a las empresas leonesas

La Cámara de Comercio de León ha acogido este jueves una jornada sobre las ‘Ventajas prácticas del vehículo eléctrico para el tejido empresarial’. El presidente de la institución, Javier Vega, ha explicado que estas charlas sirven para dar a conocer al mundo de la empresa las “bondades” del coche eléctrico y las ayudas de la Junta de Castilla y León para las empresas que quieran acoplar a su actividad el coche eléctrico. Para Vega, “no hay retorno” y las energías alternativas son la opción viable. Las jornadas han estado dirigidas especialmente a autónomos y pymes con el apoyo del Consejo de Cámaras de Castilla y León. Vega ha destacado que son “muy instructivas” y que los empresarios también cuentan con la oficina de subvenciones de la Cámara de Comercio de León para informarse sobre estas ayudas a la adquisición de vehículos y la instalación de la infraestructura de recarga. El objetivo es que estas ayudas puedan llegar a todas las empresas, ha concretado Vega.

En la jornada también ha participado el l director general de Industria de la Junta, Fernando del Campo González, que ha afirmado que la movilidad eléctrica “se puede imponer a medio plazo”. Del Campo González ha defendido que la sustitución de los motores de hibridación y de combustión por eléctricos debe acometerse de manera paralela al desarrollo de fábricas y la obtención de materias primas como cobalto y litio para evitar estrangular alguna parte de la cadena. El director general ha reconocido que la Junta no tiene planes de desarrollo de industria automovilística para la provincia leonesa, donde la apuesta se centra en la biotecnología y la ciberseguridad y el ‘software’ informático.

Del Campo González ha asegurado también que con las ayudas del Plan Moves, siempre en función del uso que se haga del vehículo, compensa el cambio a eléctrico, por el menor precio de la electricidad frente a la gasolina o el gasóleo.

En la misma línea, el director general de Energía y Minas de la Junta, Alfonso Arroyo, explicó que las ayudas rondan los 4.000 o 5.000 euros por empresa para la adquisición del vehículo y unos 1.000 euro para la instalación de la infraestructura de recargo. En el primer caso, las tramitan los concesionarios, y en el segundo, los instaladores. La cuantía puede ser aún mayor si se entrega un vehículo con más de siete años para ser achatarrado y avanzar en la renovación de la flota de transporte.

En las jornadas también ha estado presente la delegada de la Junta en León, Esther Muñoz, e Isaac Cantalapiedra, en representación del concesionario de Volvo en León.