La Junta de Castilla y León inició ayer una actuación de mantenimiento en la Catedral de León para subsanar de forma urgente los desperfectos encontrados durante el último análisis realizado a la seo tras el desprendimiento de varias piedras el pasado 13 de enero.
Las obras para la reparación de los daños sufridos en parte de la fachada del templo con los desprendimientos de hace casi un mes comenzaron ayer con la instalación de la estructura móvil que permitirá acceder a los operarios a las partes dañadas.
Los operarios trabajarán durante los próximos días para reparar los desperfectos sufridos en la piedra y fijar las superficies que pudieran dar lugar a nuevos incidentes, para mejorar la conservación del edificio y garantizar la seguridad de los peatones y visitantes.
Según el director de Patrimonio de la Junta, Enrique Saiz, el objetivo es «reparar o fijar» las parte dañadas en la torre sur de la Catedral, para lo que se ha colocado una grúa con pluma especial de las que se utilizan habitualmente en los parques eólicos.
La Junta también tiene previsto iniciar en fechas próximas el estudio de un nuevo plan de mantenimiento más exhaustivo para evitar tanto los casos de desprendimientos como las posibles desgracias personales que pueden provocar estas caídas.
Los dirigentes del Cabildo y de Patrimonio acordaron estrechar la colaboración para conservar el templo Enrique Saiz mantuvo una reunión con el Cabildo catedralicio para analizar las causas de los desprendimientos de varias partes del botaaguas del cuerpo superior de campanas de la torre sur. Tras este encuentro, el dirigente de la Junta apuntó a grietas naturales como la causa de la caída de parte del alzado.
En la reunión entre los responsables catedralicios y el dirigente autonómico también se destacó que durante el análisis efectuado por los técnicos se recogieron unas diez piezas, de un máximo de 100 gramos, que estaban sueltas, para así evitar nuevos desprendimientos y ha apuntado a las heladas y los cambios bruscos de la temperatura como las causas.
El vicario de la Catedral, Antonio Trobajo, señaló en el momento que van a colaborar «con lealtad» con la Junta de Castilla y León en la conservación de la Catedral. Para ello van a destinar los fondos que se están recaudando con las entradas a la Pulchra Leonina.
Cabe recordar que el acceso al templo religioso tiene actualmente un coste de cinco euros para todos los visitantes, con una entrada comenzó a cobrarse hace casi tres años, el 1 de marzo del 2012.
La Catedral ya pasa consulta
Concluye la instalación de una grúa con pluma para que operarios de la Junta puedan realizar las obras de reparación y fijación tras los desprendimientos
10/02/2015
Actualizado a
30/07/2019
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