Este plan director, a su juicio, debe vertebrar el noroeste a través de León o Torneros, además de contar con los enclaves de Salamanca y Ávila. No en vano, Barrios apostó por que la terminal de Abroñigal en Madrid se “desahogue” con el enclave logístico en Ávila, así como contar con una nueva plataforma electrificada especializada para el transporte de mercancías y otra para viajeros.
Durante la inauguración de la jornada 'Acciones de difusión del III Acuerdo Marco 2014-2020. El futuro del Corredor Atlántico', organizada por la Unión General de Trabajadores (UGT) en la sede del Consejo Económico y Social (CES), el consejero valoró la importancia de este plan director al favorecer la cohesión social, a través de la movilidad de las personas, pero también la cohesión económica, al mejorar la productividad de las industrias y la competitividad del sector productivo. Además, consideró que el Corredor Atlántico es clave para la cohesión territorial. “Es importante poder anclar industrias en los territorios periféricos y en las zonas rurales”, expuso.
Germán Barrios apostó por que el plan director de promoción industrial recoja la mejora de las carreteras, el ferrocarril y la conectividad. Enumeró los tres ejes para mejorar el transporte de las mercancías por ferrocarril, la conectividad en todo el territorio de Castilla y León y la interconexión eléctrica con Portugal y Francia. “Somos productores de energía y será más barata si la interconectamos con los países limítrofes”, precisó.
Hizo referencia a los “cuellos de botellas” para vertebrar el nooeste, que debe ser a través de León, y el noreste, vía Burgos, junto a la autopista del Mediterráneo desde Bélgica, Lille, Vitoria, Valladolid y Madrid. En cuanto al sureoeste, la Junta defiende que seapor Salamanca, para dar salida a las mercancías por los puertos portugueses de Leixoes y Aveiro. Por último, la vertebración del sudeste sería a través de Ávila.
El consejero de Empleo e Industria incidió en que Castilla y León tiene cinco plataformas logísticas consolidadas que son complementarias como León/Torneros, Burgos, Salamanca, Palencia (interconexión del eje norte oeste y norte este que viene de León y Burgos) y Valladolid, que es la interconexión de los transportes que vienen de Ávila y Madrid y los que proceden de Salamanca.
Volvió a utilizar el término de “cuello de botella” para hablar del importante problema de Madrid, que impide una adecuada circulación de las mercancías del sur al norte de España. Y es que recordó que los transportes de cercanías impiden el paso de otras mercancías de larga distancia. Fue entonces cuando Germán Barrios se refirió a la necesidad de que la terminal de Abroñigal sea desahogada por la falta de espacio con un enclave logístico en Ávila.
También, señaló que la plataforma que se utiliza cada cuatro minutos para cercanías entre Abroñigal y Villacastín sea nueva para que exista una electrificada para mercancías y otras para viajeros. “De esta manera se descongestionan los tráficos de viajeros por Ávila y los de mercancías porque Madrid es el punto importante para conectar los puertos de Algeciras, Valencia y Barcelona al existir una interconexión entre los corredores Atlántico y Mediterráneo a través de Madrid”, expuso.
"Política Estado-Región"
Germán Barrios apostó, en declaraciones recogidas Ical, por una “política Estado-Región” para que Castillay León opine sobre el plan director que tiene que presentar el Gobierno de España a la UE. Valoró la importancia del momento al señalar que, en la actualidad, hay 43.800 millones de euros dentro del mecanismo Conecta Europa. “Alguien tiene que pedir cuáles son los proyectos prioritarios”, sentenció.
Entre esos ejes prioritarios, el consejero de la Junta citó la doble vía electrificada, los aparcaderos de 750 metros y sistema de seguridad RMTS. “Hay que mejorar el transporte de mercancías porque es el camión eléctrico de gran tonelaje. Es importante para Castilla y León pero también para toda la UE para tener un mercado interior único y muy competitivo, ante la desaceleración económicas y las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos, los aranceles de la Administración Trump a los productos españolas y el Brexit”, significó.
Por último, señaló que las inversiones de las infraestructuras del Corredor Atlántico deben correr a cargo del Gobierno de España y la Comisión Europea mientras que la Junta debe acometer los enclaves y las plataformas logísticas, los programas territoriales de fomento industrial y los planes industriales prioritarios.