En unos días (el próximo 2 de enero) se cumplen ocho años de la entrada en vigor de la Ley Antitabaco que prohibía fumar en bares y restaurantes, una norma que suscitó mucha polémica, pero que a día de hoy se ha ganado la aceptación mayoritaria y el cumplimiento es amplio, aunque en estos dos últimos años en la provincia de León se hayan visto notablemente incrementadas las sanciones; de los seis expedientes resueltos favorablemente de 2016, se pasaba a 35 el pasado año, y este va camino de superar el histórico que se iniciaba en 2011 con 34 sanciones ya impuestas y 14 pendientes de resolver. Pero no se trataría de que en estos últimos años a los leoneses les haya dado por saltarse más la ley, sino que, como explican desde el Servicio de Sanidad de la Junta de Castilla y León en la provincia, durante unos años la falta de personal hacía descender las cifras.
El jefe del servicio provincial, Juan Antonio Valbuena, señala que la apertura de los expedientes se inicia por dos vías, la inspección directa y las denuncias, sobre todo, de la Guardia Civil, siendo las infracciones más comunes entre las registradas en León las impuestas a dueños de establecimientos en los que se ha permitido fumar (con importes que rondan los 600 euros por sanción), los particulares que fuman en lugares en los que no está permitido, o la venta de tabaco a menores, casos en los que las sanciones son más duras, en torno a los 7.000 euros. De estas últimas hubo dos en 2017 y, en lo que va de 2018, una.
La mayoría de los expedientes abiertos terminan en sanción y apenas unos pocos son archivados por causas que, según Valbuena, responden a que no se ha podido probar la infracción o porque acaba prescribiendo el procedimiento.
En todo caso, el jefe del Servicio de Sanidad cree que casi ocho años después de la entrada en vigor de la ley hay que hacer un balance positivo pues el cumplimiento es alto y el hecho de que no se fume en los establecimientos de ocio conlleva un menor riesgo para los trabajadores de los mismos y el público en general. Aunque llama la atención Valbuena sobre el contraste que ofrece el dato de venta de tabaco, que se ha incrementado, por lo que teme que se deba a un mayor número de fumadores en edades tempranas.
El primer año de Ley Antitabaco se cerró en León con 20 sanciones por un importe medio de 75 euros cada una, cantidad que ha ido creciendo exponencialmente hasta los 700 o más por sanción de estos últimos años.