Tanto desde el sindicato como desde el equipo directivo del colegio de La Virgen del Camino consideran que existe un "agravio comparativo" entre los profesores y los monitores de las empresas privadas que son adjudicatarias de los servicios del comedor. La propuesta para cubrir el tiempo que los alumnos se quedarían sin ser atendidos es la de aumentar en media hora el contrato de los monitores de comedor. Esto supondría "la solución más viable y rápida" para un problema que ha surgido por la "mala planificación", puesto que la reducción de jornada para el alumnado, que no para los docentes, ya se conocía desde comienzos del curso.
El CEO Camino de Santiago cuenta con unos 700 alumnos y el equipo directivo se ha planteado dimitir por estos "abusos", que se suman a un año en el que "han tenido que hacer de conserjes, enfermeros, psicólogos... y ahora también de monitores". "Apelan al buenismo del profesorado para que asuma las tareas de monitores de comedor. La Dirección Provincial de Educación tiene la obligación de planificar y gestionar los servicios de comedor y transporte. Esta situación era previsible y es inadmisible que recaiga en los profesores del centro", ha indicado Cristina Fernández.
Los 30 minutos de desajuste entre el horario del comedor y la llegada del autobús podía prolongarse dado que se trata de un servicio integrado que también puede ser utilizado por los vecinos del municipio de Valverde de la Virgen. En este sentido, lo que pretenden desde UGT es que ese intervalo de tiempo sea cubierto por los monitores, "que les vendría muy bien dada la precarización de sus contratos", en lugar de por los docentes, a quienes no se les ha especificado cómo serían compensados.
Más centros en la misma situación
Los contratiempos del CEO Camino de Santiago también se están produciendo en otros puntos de la provincia. De este modo, Alberto Álvarez ha asegurado que en el CRA de Huergas de Babia y en el CEO San Juan de Benavides de Órbigo estarían viviendo situaciones similares.
Del mismo modo, en el Colegio Público Manuel Ángel Cano Población, de la localidad de Cistierna, también se están produciendo problemas de conciliación entre las familias debido a la decisión de cancelar el servicio de comedor escolar en el mes de junio. El cambio de horario y las incompatibilidades con el transporte de los alumnos de la comarca que se desplazan hasta Cistierna también es el telón de fondo de esta otra polémica.
Evitar que se repita en septiembre
La reducción del horario lectivo también tendrá lugar en el mes de septiembre y el objetivo de los equipos directivos es que se corrijan los desajustes para evitar que, nuevamente, aparezcan incompatibilidades entre los servicios de transporte y comedor. "En una reunión con el director provincial de Educación, se comprometió a planificar las rutas de transporte escolar en septiembre para que no se repita la situación", apuntan desde UGT.
De no ser posible corregir este tipo de problemas en el mes de junio, en septiembre se espera que las empresas adjudicatarias puedan ampliar los horarios de los monitores para hacer compatibles ambos servicios. "No se modifica la jornada para las empresas de transporte, pero piden cambiar la de los profesores que viene regulada por ley", concluyen desde UGT cifrando en "unos 100 euros más por centro" el coste de esta posible solución al conflicto.