"La solidaridad tiene que estar bien atendida y también organizada"

El conflicto entre Rusia y Ucrania se remonta al año 2015 y Accem trabaja desde entonces con refugiados ucranianos. No obstante, el flujo migratorio se volvió más intenso hace seis meses, a finales de febrero de 2022, cuando la disputa bélica se desató por completo.

Noelia Diez Albarracín y María José Alonso son adjunta responsable en Accem León y coordinadora del Centro de Emergencia de Ucrania en Valencia de Don Juan respectivamente. Juntas analizan el desarrollo de su trabajo en los últimos seis meses y hacen balance sobre ciertas situaciones inesperadas con las que tuvieron que lidiar en su momento, hace varios meses.

Noelia considera que fue complicado "gestionar la solidaridad". "Muchas personas se desplazaron con autobuses hasta Ucrania, trajeron a refugiados a España y luego no sabían muy bien cómo manejar la situación. Ese tipo de gestos tienen que estar bien organizados. Hubo una explosión de solidaridad que no habíamos visto nunca", explica. También, añade, que "ha sucedido que muchas personas pensaban que este conflicto iba a durar días y no estaban preparadas para una situación tan duradera". Es por esto que Accem León, en coordinación con el resto de entidades, participa en un sistema de acogida nacional con el que se busca la mejor solución para cada tipo de persona.

Tanto Noelia como María José trabajan a diario por el bienestar y la autonomía de los refugiados ucranianos que están ahora mismo en la provincia, ese es su objetivo, y lo que verdaderamente les reconforta de su trabajo. Una labor que es posible gracias al engranaje que han formado en los Centros de Emergencia y que convierte su labor en "un poco más fácil2.

Cuando hacen balance, las dos trabajadoras aprovechan para poner el foco también otros conflictos bélicos, culturales o humanitarios que están sucediendo en otras partes del mundo y a los que no se les presta la misma atención. "Nosotras seguimos atendiendo a gente de Venezuela o Colombia, por ejemplo", añade Noelia, "todo nuestro trabajo de protección internacional sigue ahí", finaliza.