En cuanto a la reservas que puedanquedar en los embalses, Llorente explica que se guardarán para las siguiente campaña, siguiendo una planificación «plurianual» de los recursos hídricos disponibles para la producción agrícola. Llorente explica quesi la ocupación supera las necesidades habrá un reparto por hectárea que nunca superaría, «tengamos el agua que tengamos»,los 7.000 metros cúbicos de tope. Si las reservas fueran menos se haría un reparto, que tendría que estar listo en la primera quincena de marzo «para poder modificar la PAC y que cada uno pueda adaptar los diferentes cultivos a su explotación, porque la suma es global de metros cúbicos por explotación». De este modo, se prevé que en la primera semana de marzo se convoque a las comunidades de regantes de la cuencas Esla-Valderaduey y Órbigo para informar de los hectómetros disponibles, teniendo en cuenta la media de los últimos diez años, y poder tomar las decisiones oportunas.
Situación actual
Matías Llorente asegura que para llegar a esa dotación máxima de 7.000 metros cúbicos por hectárea, dada la situación actuales de los embalses, serían necesarios unos 170 hectómetros cúbicos en el Porma, Riaño tendría que llegar a los 380 hectómetros por el aumento de Los Payuelos y el de Los Barrios de Luna tendría que tener un mínimo d 185 hectómetros cúbicos. Ninguno de ellos cuenta actualmente con una ocupación que invite a pensar en llegar a esas previsiones, puesto que el Porma necesitaría 70 hectómetros más, Riaño más de 150 y el del Luna entre 110 y 120 hectómetros más.En esta situación, según Llorente, «hoy no tendríamos garantizado más que sacar adelante los cereales», aunque los agricultores cuentan este año con una ventaja respecto al pasado: «Este año tenemos nieve arriba, el año pasado cuando empezamos a regar no entraba casi nada en los embalses, pero este año se prevé que a lo largo de la campaña los arroyos seguirán aportando y no se restaría todo lo que se saca». Con ello existe la posibilidad de que en el Porma y en Riaño se dé una campaña similar a la del año pasado, gracias a lo que hay almacenado de nieve, pero en Barrios de Luna sería «imposible».
Por otra parte, el presidente de los regantes de la margen izquierda del Porma recuerda que en la provincia «tenemos tiempo hasta primeros de abril para las siembras» y que si se produjera una «primavera húmeda dos riegos podrán ser suficientes para salvar el cereal y se podría ahorrar el agua para el resto de cultivos». No obstante, recalca Llorente, la campaña se desarrollará «siempre con restricciones».