La medida se da a conocer justo tres semanas después de que se interrumpieran las clases en la Universidad de León (ULE), coincidiendo con las elecciones a rector en las que resultó reelegido Juan Francisco García Marín. La suspensión de la actividad académica presencial se había dado a conocer ya en otras comunidades autónomas y muchos profesores del Campus de Vegazana daban por hecha esta decisión ya antes de ser confirmada este jueves.
De hecho, algunos docentes incluso ya habían llegado a plantear esta posibilidad a sus alumnos y llevan semanas trabajando de manera online, optimizando el desarrollo de las clases para estar preparados para la recta final del curso que llegará después del parón de Semana Santa. Unas vacaciones que precisamente comienzan este viernes y que se prolongarán hasta el próximo día 14. De esta manera, solo quedarían por delante unas semanas de docencia puesto que el comienzo de la evaluación del segundo semestre del presente curso está programada para finales del mes de mayo.
Un nuevo escenario
De esta manera, la ULE propone, en el comunicado conjunto con el resto de universidades públicas de Castilla y León, "trabajar en el escenario de la enseñanza telemática" hasta finalizar el curso. Una decisión que justifican "en concordancia a con la mayor parte de las previsiones epidemiológicas y la conveniencia de establecer medidas de seguridad sanitaria".
Para conseguir salvar los estándares de calidad, desde la Consejerías y el Rectorado se propone a los profesores universitarios "revisar las guías docentes de las asignaturas". También se expone la petición de establecer "procedimientos de evaluación telemática coherentes con la situación actual".
Prácticas
Las ULE también podrá considerar, de ser necesario, ampliar el calendario académico para defender los trabajos de fin de grado y de máster, así como para la realización de prácticas curriculares esenciales. En el comunicado también se señala que se darán por superadas todas aquellas prácticas externas siempre y cuando se hayan realizado presencialmente un porcentaje mínimo de créditos y se convaliden los restantes con seminarios, cursos y otras actividades.
Los rectores concluyen su comunicado recalcando la "excepcionalidad" de la situación e insistiendo en su compromiso con el sistema universitario público. Después del parón de Semana Santa se terminarán de desarrollar todos los pormenores de esta decisión.