Así se ha puesto de manifiesto en la visita que han girado a la BRIF de Lubia (Soria) el subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, y el subdirector general de Política Forestal y Lucha contra la Desertificación, José Manuel Jaquotot, quienes han destacado el "compromiso del Gobierno de España con las comunidades autónomas para colaborar activamente en las tareas de extinción de los incendios forestales".
La Subdirección General al frente de la cual está Jaquotot se encuentra adscrita al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y es desde esta campaña la responsable de las BRIF que, con anterioridad, se enmarcaban en el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Según ha señalado, como novedad, el servicio se amplía todo el año por lo que "las bases no se cierran en diciembre y enero". Además, todas las BRIF van a tener asociada un EPRIF (Equipo de prevención integral de incendios forestales).
Por lo que respecta a la construcción de unas nuevas instalaciones para la BRIF de Soria, que costarán unos tres millones de euros, Jaquotot ha indicado que la empresa pública Tragsa ha terminado ya el anteproyecto de la nueva base y está trabajado en la redacción del proyecto técnico y de ejecución.
Esta nueva base tendrá unos 1.200 metros cuadrados y, en palabras de Miguel Latorre, "mejorará notablemente las condiciones de trabajo de los brigadistas que no solo se dedican a la extinción de incendios sino que también llevan a cabo labores silvícolas de limpieza para evitar que se produzcan estos incendios".
La base de Lubia comenzó a funcionar en 2007 y cuenta para las tareas de extinción con dos helicópteros. Estas aeronaves pueden transportar 1.200 litros de agua. Además, los brigadistas disponen de maquinaria auxiliar ligera y de todoterrenos para los desplazamientos.
El subdelegado del Gobierno ha dejado claro que estas bases suelen operar en zonas próximas, aunque pueden ser requeridas para combatir incendios en cualquier punto de España.
Campaña de verano
La campaña de verano, que es el periodo de alto riesgo, consta de 137 días naturales consecutivos entre junio y octubre que pueden ampliarse si las condiciones lo precisan. Se trabaja en modo 3-3-3, lo que significa tres días trabajando (en horario de once horas), otros tantos días a disposición y tres días de descanso.Para realizar adecuadamente el servicio, todas las BRIF disponen de un preparador físico, dos emisoristas y personal de apoyo logístico.
Además de las tareas de extinción propiamente dichas, llevan a cabo también trabajos de prevención en periodos de menor riesgo, normalmente de octubre a junio. Son tareas que persiguen evitar el inicio de los incendios forestales o, si ocurrieran, que se minimicen los daños. Estos trabajos también se llevan a cabo en colaboración y coordinación con las comunidades autónomas.