En el Ayuntamiento de León empieza a preocupar qué hacer con esas conductas ‘cómodas’, porque algunas zonas de la capital parecen haberse convertido en auténticos ‘cagaderos’. Es el caso de la muralla romana o de Las Cercas, esos vestigios de los orígenes de la ciudad que cuando no se caen a pedazos son noticia porque copan los primeros puestos de la ‘lista roja’ de España Nostra, un ránking que pone en evidencia la desidia con que demasiado a menudo se cuida el patrimonio...
El Ayuntamiento de León anuncia que intensificará la presencia policial y sancionará con más dureza las conductas incívicas A día de hoy, son muchas las zonas de la muralla que muchos ciudadanos utilizan para sacar a pasear sus mascotas y, demasiado a menudo, allí dejan los excrementos.
En 2016 hay censados en la provincia leonesa 62.164 perros, 7.459 en la ciudad, según la base de datos del Siacyl, el sistema de identificación canino de la Junta. ¿Cuántos de los dueños de esos perros no recogen los excrementos de sus mascotas en la calle? «Es una sorpresa triste la falta de civismo de tanta gente», reconoce el concejal de Seguridad y Movilidad de León, Fernando Salguero.
Aunque la titularidad oficial de la muralla es estatal, hay varias ordenanzas municipales que regulan ciertas normas sociales, tanto la de convivencia ciudadana [artículo 18: «Está terminantemente prohibido escupir o realizar las necesidades fisiológicas en las vías públicas y en los espacios de uso público o privado». «Las personas que conduzcan perros u otros animales cumplirán a este respecto lo previsto en la ordenanza específica. Cuando no existan lugares habilitados deberán llevar al animal a la calzada junto al bordillo y lo más próximo a los sumideros del alcantarillado»] como la de tenencia de perros y otros animales domésticos [artículo 10: «Como medida higiénica ineludible, las personas que conduzcan perros procurarán impedir que estos depositen sus deyecciones en vías públicas, paseos y cualquier lugar destinado al tránsito de peatones»].
En lo que va de año, la Policía ha impuesto 3 multas por no limpiar deyecciones de los animales en la calle. Quien sanciona es la Junta En el caso de los animales, aunque son los agentes de la Policía Local quienes multan las conductas incívicas que detecten, es la Junta la que se encarga de tramitar los expedientes y poner la pertinente sanción económica. En lo que va de año, fuentes del servicio de Agricultura de la delegación territorial de la Junta en León señalan que han puesto 130 sanciones económicas por expedientes relacionados con animales domésticos, por las que han recaudado 83.000 euros. Sin embargo, sólo tres de estas multas fueron para dueños de perros que no recogieron los excrementos de sus canes.
"Habrá más presencia policial"
En el Ayuntamiento, se están planeando cómo combatir esta ‘plaga’ de incívicos que tanto indigna a los vecinos de las zonas más afectadas, repletas de excrementos caninos y malos olores.
«Que haya que hacer esto es increíble», reconoce Salguero, «pero vamos a intensificar la vigilancia y a aplicar con dureza las ordenanza para corregir este incivismo y la falta de educación de algunos dueños de perros». También pondrán en marcha una nueva campaña de concienciación, «tanto en las Cercas como en otras zonas de la ciudad». A su juicio, estas conductas sólo pueden deberse a «la comodidad o la dejadez».
Los vecinos de Las Cercas
El malestar de los vecinos del entorno de Las Cercas (calle Doctor Félix Rejas y alrededores) parece comprensible: no hay día que alguno de ellos no contemple desde la ventana de su casa cómo los paseadores de perros ven hacer sus necesidades a sus canes y muchos de ellos no hacen ni el mínimo gesto para recoger los excrementos. «Llegan, esperan hasta que cagan y mean, y con las mismas se van», dice una vecina que asegura haber llamado al Ayuntamiento decenas de veces para quejarse. «Vete hasta el final de la calle bien arrimada a la muralla y verás qué rastro de cagadas, es un asco», lamenta su marido. Si se comprueba, se ve que es así. Otro vecino relata cómo un día vio a una chica recoger los restos de su perro «y seguidamente, entre risas, arrojar la bolsita al otro lado de la cerca...».Vecino a vecino, hay anécdotas para llenar varias páginas. «Hemos visto hasta a gente haciendo sus necesidades mayores aquí por la noche», dice otra vecina, que se queja de que en la zona suele haber botellón los fines de semana, «y nunca viene la Policía, ¿por qué?». Su hija, profesora universitaria, remarca que los excrementos caninos son una fuente de enfermedades por los parásitos que contienen, «especialmente peligrosos para niños, pacientes oncológicos, trasplantadas, embarazadas y ancianos».
34 personas han sido sancionadas por el Ayuntamiento en 2016 por realizar sus necesidades fisiológicas en la vía pública Consultadas las ordenanzas municipales de varios puntos de la geografía española, la conclusión es que la mayoría son cada vez menos transigentes con los dueños de perros que no recogen los excrementos de los animales. Algunos han optado por aumentar la cuantía de las multas que castigan esta conducta incívica e insalubre con hasta 1.500 euros. En León, en teoría, hasta 600 euros.
El Ayuntamiento de León ya puso en marcha hace unas semanas una campaña de concienciación y repartió 18.000 bolsas para recoger los excrementos de las mascotas en cuatro puntos de reparto. Con ‘Caquítala, el poder de la bolsa’ se perseguía eso, que los propietarios de canes se responsabilizaran de las deposiciones de sus perros, un problema en varias zonas de la ciudad que preocupa en el Consistorio.
El edil Salguero, responsable de la policía municipal, no ve claro cómo atajar definitivamente el problema. «De momento, con vigilancia y más multas...».