Prácticamente, uno de cada cuatro personas de León ha contraído ya el coronavirus. Un dato que se extrae de las estadísticas oficiales de la Junta de Castilla y León pero que, probablemente, sea considerablemente más elevado.
La evolución de la pandemia en León, que ha ido siempre de la mano a la del resto de la comunidad autónoma y casi del país, puede dividirse en las seis olas que hasta ahora se han sucedido... pero también puede simplificarse a solo dos etapas: antes y después de las vacunas. Los datos no dejan lugar a las dudas y la vacunación ha supuesto el verdadero punto de inflexión dentro de la crisis sanitaria que cumple hoy dos años.
La primera dosis contra el Covid en León fue administrada el 30 de diciembre de 2020. El problema no se acabó entonces, ni muchísimo menos, pero las cifras de mortalidad se redujeron de forma notable en las fases posteriores de expansión de la pandemia.
Hace justo dos años, la edición impresa de este periódico abría con la información "El coronavirus llega a la provincia y la Junta alerta de que habrá más casos". El desconocimiento de la que se venía encima era evidente. Hace un año, en un balance similar al que usted está leyendo en estos momentos, la principal noticia de La Nueva Crónica se titulaba: "La pandemia cumple un año en León con 37.000 casos y 2.000 fallecidos". Este martes en la portada puede leer: "Dos años de la pandemia del Covid-19 en León: 107.927 contagios y 2.556 víctimas". Seguimos en pandemia, pero la situación ha cambiado radicalmente gracias a la respuesta ciudadana a las campañas de vacunación. Así, en el segundo año de pandemia en León solamente se han producido una cuarta parte de muertes por Covid, a pesar de que los contagios han estado cerca de duplicarse. Una vez más se comprueba la máxima que la comunidad científica ha repetido tantas y tantas veces ante los movimientos negacionistas: la vacuna no protege de la infección, pero sí de la enfermedad grave y de la muerte. Al menos, en la inmensa mayoría de los casos. León no ha sido una excepción.
Algo más de 1.400 de las muertes totales causadas por el Covid en la provincia se han producido en el Complejo Asistencial Universitario de León (Caule) y en el Hospital de El Bierzo. Tanto en estos hospitales como en las residencias de mayores, la ola que más víctimas ha causado ha sido la primera. Igualmente, la segunda y la tercera también provocaron una alta mortalidad debido a que las vacunas no se habían generalizado entre la población. A partir de la cuarta, con el grueso de la ciudadanía leonesa ya inmunizada, la situación cambió de forma radical. Solamente la sexta ola, tras marcar récords de contagios, ha vuelto a incrementar de forma moderada el número de fallecidos, aunque nunca llegando a los niveles previos a la llegada de las vacunas.
El día con más positivos
Precisamente ha sido la variante Ómicron la que ha revolucionado la forma de abordar la pandemia con sus más de 50.000 contagios. El récord en un solo día se alcanzó el pasado 11 de enero, justo después de las vacaciones de Navidad, cuando la Consejería de Sanidad notificó 1.954 positivos. En 16 ocasiones dentro de esta sexta ola se ha superado el millar de nuevos casos en la provincia. Hasta la llegada de Ómicron, el número máximo de contagios diarios estaba ligeramente por encima de los 700, durante la tercera ola.
Por meses, el que ha dejado un mayor número de contagios de estos dos años ha sido enero de 2022, en el que se superaron los 32.700 casos de coronavirus. En lado opuesto de la balanza se sitúan junio y julio de 2020, con en torno al medio centenar de casos.
En lo que respecta a muertes hospitalarias, el mes más negro fue abril de 2020, en el que se alcanzaron las 260 víctimas del coronavirus en el Caule y en el Hospital de El Bierzo. En esos primeros compases se llegó a las cifras de 19 muertes por Covid en un solo día, como el 2 de abril de 2020, que se elevarían notablemente de contabilizar los fallecidos por la enfermedad en sus casas o en residencias de mayores.
A la hora de analizar estos datos hay que tener en cuenta, por tanto, el hecho de que la Junta actualiza diariamente solo esas cifras de muertes registradas únicamente en hospitales y también la evoluciónque ha habido en los diagnósticos a lo largo de la crisis sanitaria. La primera ola dejó las cifras más elevadas de mortalidad y, sin embargo, solo se registraron algo más de 3.000 positivos. Con la realización de cribados masivos y la llegada de los test de autodiagnóstico, el rastreo se facilitó enormemente.
Con la sexta ola llegando a su fin y las cada vez más voces que indican a que será la última en la que se contabilizarán los contagios asintomáticos o leves, la pandemia del Covid-19 parece estar llegando a una nueva fase que estará marcada por la convivencia y la normalización de la enfermedad. Lo más probable es que no se vaya, quizá que vuelva estacionalmente o en forma de otras variantes, pero todo apunta a que no será igual. Dos años después, parece que a los leoneses les ha llegado la hora de regresar a la añorada 'vieja normalidad'.