“Y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti”. Con el Génesis como punto de partida, se han presentado en León ‘Las hijas de Eva’ en un homenaje a las mujeres señaladas, sometidas, expulsadas. Un recuerdo a las maltratadas, a las asesinadas.
Todas ellas estaban este lunes en la plaza Botines de León. Lo estaban representadas por 41 alumnas de la Escuela de Arte y Conservación y Restauración de Bienes Culturales de la capital que, como ya es habitual, han escenificado una impactante performance con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
“Eva, creada para hacerle compañía al hombre”, se decía mientras del piano en directo salía el 'Amanecer' de Grieg. Un nacimiento que presentaba a las chicas como árboles entrelazando sus brazos y sujetando las manzanas, el fruto prohibido que llevaba escrito los nombres de todas las víctimas asesinadas por sus parejas o exparejas durante este 2024: 41 nombres que también se han escuchado en la plaza.
Apareció además la gran serpiente, metáfora de la violencia machista, que acaba con todas ellas vendadas y desplomadas para después resurgir, de nuevo, en otro gran árbol, esta vez más fuerte, más unido. Poderoso. Los cuerpos de las mujeres como sustento de unas ramas de sororidad y denuncia. Los cuerpos de ‘Las hijas de Eva’, salvajes, libres y vivas.