La provincia de León es la que más ha incrementado su mortalidad de toda España en lo que va de año. Según los datos que maneja el Instituto Nacional de Estadística (INE), en su estimación del número de defunciones semanales, ninguna otra demarcación del país ha alcanzado el aumento del 17,12 por ciento en las cifras de fallecimientos que está registrando el territorio leonés en el presente 2024.
De este modo, en las primeras 39 semanas de 2024, hasta finales de septiembre, se han contabilizado en la provincia un total de 5.186 decesos, más de 750 muertes a mayores que el pasado año. En ningún otro punto de Castilla y León se ha registrado un número tan elevado de muertes en estos nueve meses.
En base a estos datos, la media del número de defunciones diarias en León supera las 16 en el presente año. Estas cifras 'negras', esta alta tasa de mortalidad que va de la mano al notable envejecimiento de la población leonesa, suponen el principal motivo de la crisis demográfica que arrastra León. De hecho, en base a la actualización de la Encuesta Continua de Población del INE hecha pública la semana pasada y a fecha 1 de octubre, coincidente con las 39 semanas de la estimación de defunciones, la provincia ha perdido 1.534 personas en un año. El desmedido ritmo de decesos justifica, por tanto, que el descenso demográfico se haya agudizado.
La sobremortalidad durante el presente año se traduce en algo más de 750 muertes a mayores que en 2023
Inmediatamente después del incremento interanual en el número de defunciones del 17,12 por ciento en León, el más alto de España en los primeros nueve meses del año, aparece el aumentos de la mortalidad en Palencia (12,26 por ciento). Ya en porcentajes mucho más discretos, Guadalajara queda en tercera posición (7,2 por ciento).
El hecho de que León se encuentre a la cabeza de España en lo que ha incremento de la mortalidad se refiere, se debe en buena medida a las cifras desorbitadas de las primeras semanas del año. Enero fue especialmente trágico, contabilizando el INE más de 700 decesos de leoneses en las cuatro primeras semanas del año. Este mes suele coincidir con los picos de gripe, y en los últimos años también con un mayor número de contagios de Covid, por lo que el aumento de los decesos acostumbra a ir en paralelo.
Las cifras de un enero 'negro'
En concreto, la peor semana de lo que va de año fue la primera: 193 leoneses perdieron la vida del 1 al 7 de enero. De manera consecuente, la segunda, tercera y cuarta semana de 2024 ocupan, de la misma manera, una idéntica posición en lo que a semanas con mayor número de decesos se refiere: 175 entre el 8 y el 14 de enero, 171 entre los días 15 y 21 y 169 entre el 22 y el 28 del mismo mes.
Después de este aciago comienzo del ejercicio, las cifras de mortalidad se han ido estabilizando, hasta llegar a registrarse las semanas con menos fallecimientos entre finales de agosto y comienzos de septiembre. De hecho, en la última semana de agosto no se alcanzó ni siquiera el centenar de decesos en territorio leonés.
Solo peor que en 2020
La singularidad del incremento de la mortalidad leonesa en el presente año, más allá del hecho de estar a la cabeza en el cómputo nacional, queda patente también en que 2024 está siendo el año con más fallecimientos en la provincia en lo que va de siglo, a excepción del aquel fatídico 2020 marcado por la pandemia del Covid. En las primeras 39 semanas de esa anualidad se contabilizaron 5.580 muertes en León. Las 5.186 que el INE contabiliza entre enero y finales de septiembre suponen, con claridad, el segundo peor saldo en este mismo intervalo desde comienzos de la serie histórica, en el 2000.
A estas mismas alturas del ejercicio, a finales de septiembre, León no alcanzaba las 4.000 defunciones en los primeros años del siglo XXI. Del mismo modo, siempre en base a los datos más actualizados que aporta el INE, no se superó la barrera de las 4.500 hasta 2012, aunque esta ha sido una cantidad que se ha rebasado con frecuencia desde entonces en idéntico intervalo temporal: en 2015, 2017, 2018, 2019, 2020, 2021 y 2022. En cuanto a la cota de los 5.000 fallecimientos en nueve meses, solo se ha superado este siglo en el pandémico 2020, en 2022 y en el presente año.
Cuando se encara ya el tramo final del ejercicio, todo apunta a que este será uno de los años más mortíferos en León. La elevada mortalidad continúa siendo, así, la piedra de toque de la crisis demográfica que atraviesa la provincia.