En comparación con el anterior periodo, se constata que nacen menos y mueren más. En el primer semestre de 2016 –y según la misma fuente– los nacimientos ascendieron a 1.418 y las defunciones registradas fueron 3.037, es decir, que hubo una diferencia de 1.619 personas, casi 400 menos que este año.
De los nacidos en la primera mitad de este año, 631 fueron varones y 626 mujeres. Una diferencia escasa, pero que inclina la balanza en favor de los hombres. Mientras que en el caso de las defunciones, también por una diferencia pequeña, murieron más mujeres (1.642) que varones (1.615).
A nivel autonómico, Castilla y León presentó, durante el primer semestre del año, un saldo vegetativo negativo, al producirse una diferencia entre los nacimientos y las defunciones de 7.906 personas. Asimismo, entre enero y junio, España registró 187.703 nacimientos, un 6,3% menos que en el mismo periodo del año anterior, al producirse 12.552 nacimientos menos que en el mismo periodo de 2016. Continúa así la tendencia decreciente en el número de nacimientos desde 2008. Además, fallecieron 219.835 personas, un 4,5% más. De esta forma, el crecimiento vegetativo de la población (es decir, la diferencia entre nacimientos y defunciones) fue negativo en 32.132 personas.
495 bodas en seis meses
Un total de 495 parejas contrajeron matrimonio en la provincia de León entre enero y junio de este año, casi un centenar menos que en el mismo periodo del año anterior (506). Aun así, se incrementaron los celebrados exclusivamente por lo civil (409 frente a los 394 de 2016). Bajan, por el contrario, los celebrados según la religión católica, que en la primera mitad de este año fueron 79 (95 el pasado ejercicio). Además, dos se oficiaron por el rito de otras religiones y acerca de otros cinco no consta forma de celebración. Por meses, mayo (con 116) y junio (con 141) fueron los más demandados por las parejas, aunque no hubo mes en blanco, en enero fueron 44 los enlaces matrimoniales registados en la provincia, en febrero 44, en marzo 72 y en abril 82.
Por comunidades, la de Castilla y León es una de las dos autonomías donde menos se redujeron los matrimonios, en concreto, un 1,1%, hasta los 7.550, por encima del menos 0,5% de Canarias. Por el contrario, País Vasco fue la única autonomía donde crecieron un 3,9 por ciento. La ciudad autónoma de Ceuta (18%), Murcia (15,1%) y Melilla (12,2%) registraron los mayores descensos. En España, las cifras de matrimonios registrados tampoco fueron muy halagüeñas durante el primer semestre del año, con 68.769 frente a los 73.307 de 2016, lo que supone un 6,2% menos. Y de ellos, un 2,9% fueron de parejas del mismo sexo (1.966).