León se vuelca en la prevención del suicidio

Varios enclaves de la capital provincial acogieron numerosas actividades de sensibilización

10/09/2024
 Actualizado a 10/09/2024
Autoridades y asistentes a los actos por el Día Mundial para la Prevención del Suicidio formaron una cadena humana en la fachada del Palacio de los Guzmanes. | MAURICIO PEÑA
Autoridades y asistentes a los actos por el Día Mundial para la Prevención del Suicidio formaron una cadena humana en la fachada del Palacio de los Guzmanes. | MAURICIO PEÑA

«Las personas que se suicidan no quieren morir, sino dejar de sufrir». Es una afirmación del decano del Colegio Oficial de Psicología de Castilla y León (Copcyl), Jaime Gutiérrez. Su sentido tuvo un peso todavía mayor este martes, durante la celebración del Día Mundial para la Prevencion del Suicidio. Un día que convirtió a la capital leonesa en escenario para la puesta en marcha de varios actos y por el que leoneses y leonesas salieron a la calle a concienciar –y concienciarse– respecto a la muerte silenciosa que, en 2023, se cobraba la vida de 3.952 personas en España, 192 en la comunidad y 45 en la provincia. 

Bajo el pretexto de visibilizar los intentos y actos autolíticos, el Teléfono de la Esperanza organizó un programa completo enmarcado en su proyecto ‘ConéctaTE a la vida’. La plaza de Botines fue testigo de la complicidad entre asistentes, que pudieron dejar su mensaje en la urna denominada ‘Comparte tu motivo’, además de escuchar los «motivos» del resto de participantes. Una cadena humana en el mismo enclave funcionó como preámbulo para la posterior lectura del manifiesto a cargo de las autoridades y el recital poético por cortesía de Marcelo Tettamanti y Ana Ibis, que tuvieron lugar en el patio del Palacio de los Guzmanes. 

El servicio de Atención Primaria se sumó a la jornada de la mano de una intervención comunitaria con una mesa informativa en el centro de salud de Eras de Renueva y otras actividades de sensibilización, como la desarrollada por la Gerencia de Atención Primaria con motivo de un programa para la prevención del suicidio liderado por profesionales de Enfermería.  Además, la asociación Activos y Felices tiene programada una ponencia para el 26 de septiembre, a las 19:30 horas, en el salón de actos de la calle Alfonso V. Bajo el título ‘El suicidio, ¿se puede prevenir?’, la psicóloga habilitada sanitaria con más de dos décadas de experiencia, Arantxa Santos de la Rosa, «abordará este complejo tema para poder entenderlo mejor, desmontar mitos y creencias que nos limitan su abordaje, comprender y, sobre todo, prevenir y ayudar a las personas que sufren». Todo en un acto de entrada libre y gratuita.

Un instante del recital poético de Marcelo Tettamanti y Ana Ibis. | MAURICIO PEÑA
Un instante del recital poético de Marcelo Tettamanti y Ana Ibis. | MAURICIO PEÑA

 

Concienciación todo el año

A pesar de que el Día Mundial para la Prevención del Suicidio marque en el calendario el 10 de septiembre, el cuidado de la salud mental es un ejercicio que debe practicarse todos los días del año. Esa idea es la que motiva a la Asociación Salud Mental León y el resto de miembros de la Federación Salud Mental Castilla y León para desarrollar iniciativas como el programa ‘Segundas Oportunidades’, con el que este año han realizado «un análisis de datos del suicidio, tanto a nivel regional como dentro del movimiento asociativo, con el objetivo de contribuir al diseño de estrategias y proyectos eficaces de prevención»; un programa que pone el acento en la formación de profesionales sanitarios en materia preventiva. Otra de las acciones desarrolladas por la entidad es la elaboración de un ‘Manual sobre suicidio para medios de comunicación’; «un documento sencillo, pero muy concreto y práctico, que pueda ayudar a los medios a abordar noticias que deben ser tratadas con respeto y cuidado para conseguir el efecto preventivo». 

Por su parte, el Copcyl ha creado «un decálogo de comportamientos previos al suicidio», que se erige como una pieza clave para dotar a las personas afectadas por un «estado mental de desesperanza» de la ayuda necesaria. Manifestaciones de pérdida del sentido de vivir, verbalizaciones de muerte y/o soledad, disminución significativa de relaciones sociales, abandono de actividades gratificantes, indiferencia a los elogios, cambios en el aspecto físico y en la imagen corporal, drogas y/o medicación, circunstancias vitales traumáticas, exposición a riesgos innecesarios y desprendimiento de posesiones y pérdidas son las diez señales recogidas por el Copcyl para detectar la conducta suicida.

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