Las mascarillas vuelven a protagonizar el debate sanitario, y también político, de los últimos días. Lo hacen tras el anuncio del Ministerio de Sanidad de obligar su uso en los centros hospitalarios y sanitarios a partir de este miércoles. Un aviso que llega después de un Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud en el que las comunidades autónomas presentaban opiniones dispares.
Mientras la Administración y las consejerías se enzarzan en debates sobre la recomendación, obligatoriedad o idoneidad de su utilidad, en la calle lo tienen claro. Mascarilla en los centros sanitarios sí. Toses, mocos o malestar están a la orden del día y los virus que llevan varias semanas rondando en las calles los centros de salud preocupan a los leoneses como Carmen, que considera que "con lo que hemos pasado es importante que se puedan utilizar otra vez". También está la opinión de José Luis, quien cree que "en los centros donde se mueve mucha gente que va con síntomas de enfermedades y gripes, es necesario. Luego en la calle ya no".
En ciertos casos no lo quieren solo como opción recomendable, como es la apuesta de la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León, si no que son más de la opinión del Ministerio. "No está solo el coronavirus, también hay otras enfermedades o catarros y creo que sí que tendrían que ser obligatorias", opina Laura. De la misma manera, Carmen cree que "si es solo recomendable la gente no lo utiliza".
Algunos leoneses, incluso, creen que además de los centros sanitarios hay otros espacios vulnerables en los que ellos utilizarían la mascarilla, como "en el transporte público, aunque nos quejemos", propone Laura. Opinión que comparte Antonio, sobre todo "en los que van hacia los hospitales".
Otros, por su parte, piensan que esta herramienta de protección personal que comenzamos a usar en 2020 no tenía que haber desaparecido. En la calle, José Luis considera que "como los Gobiernos mandan" finalmente se quitaron y María Dolores señala que "me la suelo poner siempre cuando hya mucho jaleo, cuando voy al ambulatorio o a la residencia". "En la calle y en todos lados tendríamos que tenerla, por lo menos cuando vienen estas gripes tan fuertes", añade.
Un año después las mascarillas vuelven a estar en la boca de todos y esta vez, en el sentido más literal.