Los agentes turísticos de Las Médulas denuncian falta de vigilancia del paraje

Consideran que la Cuevona se ha convertido en el "cagadero" del espacio declarado Patrimonio de la Humanidad y que necesita una regulación urgente de sus trazados

Mar Iglesias
27/07/2016
 Actualizado a 19/09/2019
Visita a la Cuevona en una imagen de archivo.| CÉSAR FERNÁNDEZ (ICAL)
Visita a la Cuevona en una imagen de archivo.| CÉSAR FERNÁNDEZ (ICAL)
La Asociación de Promotores Turísticos de las Médulas, Aprotume, liderada por Fina Gómez, pide más regulación y vigilancia en el espacio protegido "porque cuando las visitas se masifican, la gente deja de tener conciencia de lo que está viendo y esto se convierte en algo sin orden ni concierto".  Reconoce Gómez, propietaria de uno de los complejos turísticos más importantes de Médulas, Agoga, que el potencial turístico de Médulas es envidiable, pero que sigue sin mimarse por las administraciones "no consiguen ponerse de acuerdo y eso hace que no se den pasos adelante", dice. Desconoce si el Plan director que se redactó hace años sigue en un cajón o si se está trabajando sobre él, pero lo que ve día a día es que "nos siguen aparcando en cualquier parte, aunque se intenta regular y, cuando hay mucha gente, no se controla la limpieza".

De extrema gravedad considera que es la situación de la Cuevona "es un verdadero cagadero", lamenta, cuando su visita es la parte principal de todo el paraje "es lamentable que lo que nos han dejado los romanos no se esté regulando para que continúe, que cualquiera pueda venir y cortar la rama de un castaño milenario. Creemos que hay que hacer algo ya" y, considera que es responsabilidad de todas las administraciones. Las quejas de los turistas que escucha Gómez ponen la tilde "en el descuido del paraje, pero, sobre todo, por esa falta de vigilancia". Por lo demás, este año no se plantean problemas con el abastecimiento de agua "estamos aguantando", dice Gómez. Además, asegura que esta última quincena de mes "está siendo más floja que otras veces". Reconoce que la situación política del país hace que los turistas se corten las alas a la hora de establecer sus gastos de vacaciones "y también se nota la ola de calor, que parece que no les hace salir de casa". El mes de mayo, por el contrario, asegura que fue de los mejores, pero ahora ha llegado la bajada, que espera que se complemente con un repunte en agosto "que suele ser un mes muy bueno". Tal vez el cierre de la Domus o de los centros de interpretación también contribuyan a esa merma de visitas «todo va sumando», dice Gómez.

El Consistorio pondrá señales

En los últimos días, el alcalde de Carucedo, Alfonso Fernández pedía una mejora en la señalización de entrada a Médulas, recuperando la colocación de un punto de información a la entrada del paraje, en la Nacional 536 "si tuviéramos presupuesto la colocaríamos nosotros, pero tiene que ser una administración superior". Lo solicitaba por el peligro que suele entrañar la parada de los turistas en plena Nacional para corregir el itinerario, algo que incluso a veces produce taponamientos. Pedía, además, una revisión de las instrucciones del GPS, puesto que, en muchas ocasiones se manda a los conductores entrar a Médulas por una calle anterior a la real, que está cerrada, y se producen interrupciones de tráfico cuando los turistas quieren recuperar el itinerario "o cuando pasa algún autobús, ha llegado a producir desperfectos", dice.

Fernández vuelve a incidir en el problema que existe con la falta de potestades sobre el paraje "donde hay muchas manos, al final no sabes a quién le corresponde nada. Lo que sí sabes es que tú no tienes la potestad, porque nos la ha quitado", lamenta. Asegura el regidor que solicitó a la Fundación Las Médulas un operario para que se ocupara de controlar los recorridos y de la limpieza de la zona "para tener un control, como debe ser en estos parajes, que son espacios culturales y se está demostrando que se erosiona el terreno, porque la gente sale de las rutas marcadas". También considera que el peor trago llega en la Cuevona, donde asegura que la suciedad se hace patente, pero también la inseguridad "había una valla colocada  pero ahora puede pasar cualquier cosa y ¿quién tiene la responsabilidad si es así?, nosotros no", recalca.

El alcalde prevé acometer obras para marcar los caminos "hemos conseguido una subvención para ello" y también colocarán carteles que conciencien al visitante, pero reitera que es la Junta la que dirige el paraje y quien debe responsabilizarse de estas medidas "pero no quiero que la gente se vaya con la sensación de que si esto estuviera en otro sitio estaría mejor gestionado, como está pasando y, al final, les doy la razón", lamenta.
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