Así, los alcaldes trasladaron a Mata que la minería del carbón en la montaña central leonesa vuelve a atravesar un duro momento, ya que la falta de compra de mineral por parte de las empresas eléctricas ha propiciado que la Hullera Vasco-Leonesa ponga en marcha un nuevo expediente de regulación de empleo que afectará a más de 700 trabajadores. Ante esta crítica situación, la comarca vive de nuevo momentos de incertidumbre, «dado que el carbón ha sido y es, históricamente, el principal motor de nuestros municipios». De esta actividad, que lleva desarrollándose en la cuenca Ciñera-Matallana desde hace más de un siglo, «dependen de manera directa e indirecta miles de familias que ven con desasosiego peligrar su futuro».
Durante el encuentro los regidores solicitaron la puesta en marcha del mecanismo que regule la compra de carbón y garantice la estabilidad de las empresas mineras.
Trasladaron a Teresa Mata la delicada situación del sector y la preocupaciónen toda la comarca Asimismo, pidieron una negociación política para que la Hullera Vasco-Leonesa pueda abastecer con su carbón a las empresas eléctricas de manera inmediata. Por ultimo, pidieron el compromiso firme del Gobierno Central para hacer efectivo el pago de las sentencias firmes que se adeudan a la Hullera, una balón de oxigeno totalmente necesario para solventar la situación financiera de la firma. Eso sí, los alcaldes incidieron en que estos pagos, según recalcaron, deberán ir unidos a que la firma minera normalice el pago de los salarios que se adeudan a los trabajadores.
Para los regidores populares de la montaña central estos tres ejes son básicos para garantizar la situación y estabilidad de la Hullera Vasco-Leonesa. Aseguran estar convencidos de la viabilidad del sector, apostando por el carbón como fuente de energía autóctona. Por su parte, la subdelegada del Gobierno mostró su apoyo, compromiso y disposición para abordar la delicada situación que atraviesa la minería del carbón.
La situación de la minería, y en concreto de la Hullera, se complica por momentos. En el caso de la Hullera, la falta de soluciones a corto plazo podría desembocar en un posible concurso de acreedores a partir del próximo 10 de junio. Por ello, es fundamental la rapidez en los trámites para evitar la posible liquidación de la firma minera.
Carbunión pide que la orden ministerial sea "atractiva" para las compañías eléctricas
La directora general de Carbunión, Mercedes Martín, ha reclamado que la orden ministerial que regulará la compra de carbón por parte de las compañías eléctricas resulte «lo suficientemente atractiva» para que esas empresas lleven a cabo unas inversiones que a su juicio pueden ser «una solución de futuro».
La directora general de la patronal del sector a la que pertenecen todas las empresas productoras de carbón, describió la complicada situación de un sector que ahora está pendiente del mecanismo que está diseñando del Gobierno y que «lleva un cierto retraso», para «facilitar el consumo de este carbón». Según comentó, se ha decidido ir hacia la concesión de ayudas las empresas «para que inviertan», de manera que si la orden ministerial resulta «lo suficientemente atractiva» desde el punto de vista económico, podría ser «una solución de futuro». A su juicio, la solución pasa por «el desarrollo lo antes posible de la orden ministerial, incentivando las inversiones en las empresas eléctricas, que lleva condicionada esa compra de carbón», ya que dichas empresas están diseñadas para «ese mix de carbón nacional e importado».
Mercedes Martín recalcó que ante la «mucha incertidumbre» que existe en este sentido, «no se está produciendo de manera regular la compra», lo que hace que «no se cubran los costes fijos» tras la reducción del 90 por ciento de las ayudas durante los últimos tres años, debido a la reestructuración del sector.
«Si hay esa incertidumbre y no se vende, las minas tienen que parar», indicó la directora general de Carbunión, antes de añadir que este tipo de producción «no se puede parar y abandonar», de ahí que a su juicio la situación de las empresas sea «muy delicada». Tras apuntar que el sector se encuentra en un momento «complicado» y de «ebullición» como consecuencia de esa «incertidumbre», recordó cómo en los dos últimos años la producción se ha reducido en cerca de 3 millones de toneladas, lo que supone un descenso del 50%.
Al respecto, mostró su «esperanza» de que con la nueva orden ministerial «se recupere parte de la producción». «Qué menos que los seis millones de toneladas anuales para garantizar la seguridad de suministro de un país», lo que supone «aproximadamente el 18% ó el 20% de la electricidad del mix nacional», apuntó.