Según Hostelería de León, las consecuencias económicas de la pandemia pueden llevar al cierre a un tercio de los bares y cafeterías de la capital provincial. Un descenso del número de establecimientos hosteleros que, no en el peor de los escenarios, provocaría la pérdida de más de un millar de puestos de trabajo en la ciudad.
Según las cuentas que manejan en Hostelería de León, aunque el cierre de bares y cafeterías se redujera a una cuarta parte, la destrucción de empleo afectaría a más de un millar de personas. "En la ciudad de León pueden cerrar a causa de esta crisis unos 250 establecimientos y eso deja, bien a gusto, a más de 1.000 personas en la calle solo en la hostelería", calcula el presidente de la asociación provincial de hosteleros, Martín Méndez.
Los hosteleros quieren que el Gobierno les aclare cómo será la 'nueva normalidad' para saber a qué atenerse Desde Hostelería de España, sin embargo, realizan unas estimaciones levemente más optimistas. No obstante, también implicarían el cierre de un 20 por ciento de establecimientos hosteleros. Es decir, las cifras que se manejan actualmente ponen de relieve que el Covid-19 se llevará por delante a uno de cada cinco bares españoles.
No obstante, la situación de la ciudad de León se agrava por "la dependencia de la hostelería y del comercio", ambos sectores claves para atraer turismo. "Con las fronteras interprovinciales cerradas, la capacidad que tiene León para generar negocio es insuficiente. La población local no puede sostener a los más de 1.000 bares que tenemos", considera el portavoz de Hostelería de León.
Reducción de plantillas
Junto a esta sangría empresarial, Hostelería de León destaca que también se dará una importante crisis laboral en el sector. Hasta un 75 por ciento de los bares y cafeterías de la ciudad reducirán sus plantillas de trabajadores, en una situación que los hosteleros califican como "muy compleja". A la espera de las posibles ayudas que puedan llegar para conservar estos empleos, el gremio da por asumido que, en el mejor de los casos, un millar de leoneses perderán su puesto de trabajo en el sector hostelero durante los próximos meses.
Actualmente, según los datos de la Junta de Castilla y León que facilita a este periódico Hostelería de León, en la capital leonesa se mantienen abiertos 828 bares, 144 cafeterías y 250 restaurantes. En el conjunto provincial estas cifras aumentarían hasta 2.681 bares, 299 cafeterías y 1.205 restaurantes. "Los restaurantes habitualmente tienen contratado a más personal, por lo que todavía se aumentarían más las cifras de desempleo", valora Martín Méndez.
Afrontando la desescalada
Hasta llegar a ese, casi fatídico, horizonte laboral que auguran los hosteleros, el sector tendrá que hacer frente a una desescalada que genera muchas dudas. De esta manera, la hostelería leonesa aventura que tienen por delante "complicadas semanas de transición". "Tampoco nadie nos dice qué pasará en la ‘nueva normalidad’ y cuándo habrá servicio de barra. Se supone que si entramos en la 'Fase 1' el 25 de mayo tendríamos un 50 por ciento de ocupación en las terrazas. Pero lo último que se especifica es un 30 por ciento del aforo para las mesas interiores, para las barras con bares va a pasar tiempo porque parece que todavía no se contempla", manifiesta el presidente de Hostelería de León.
Por el momento, según explican desde la asociación provincial que representa al sector, la mayor parte de las prestaciones de los Ertes sí que están siendo cobradas por los empleados afectados por el cese de la actividad hostelera. Sin embargo, otro de los problemas añadidos para el gremio se encuentra en el pago de los alquileres que tienen que afrontar aquellos que no sean propietarios de los locales en los que atienden a su clientela. "El tema de los alquileres tiene muy mala pinta. O dan alguna ayuda para que los hosteleros afrontemos estos pagos o a ver qué pasa. Desde luego, nadie puede prohibir que se pague la renta a un propietario", comenta Martín Méndez.
Los hosteleros recuerdan que, "aunque paguen los sueldos y las cotizaciones sociales", los bares generan "muchos gastos". De este modo, desde mediados de marzo ponen de relieve que han cumplido pagando cuotas, deudas a proveedores y facturas pero que la situación actual es "imposible" de mantener.
Críticas a Junta y Ayuntamiento
Los hosteleros consideran que ha existido un abandono institucional y critican la insuficiencia de las medidas emprendidas por el Ayuntamiento de León y de la Junta de Castilla y León en las últimas semanas. De hecho, Hostelería de León ha emitido recientemente algunos comunicados críticos con esta falta de soluciones desde el sector público.
Hostelería de León lamenta que el Ayuntamiento inicie el proyecto de Ordoño en la situación de crisis actual A nivel autonómico, lamentan que las ayudas no están siendo suficientes para hacer frente a las dimensiones de la crisis del coronavirus. "Han anunciado 1,7 millones de euros para el turismo, pero dejando fuera a bares y cafeterías. Han cribado de tal manera que la ayuda llegue solo a 900 establecimientos, cuando en toda Castilla y León hay más de 30.000", lamentan desde Hostelería de León.
A este respecto, la Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León emitió hace unos días un comunicado en el que expresaba su "indignación" con la falta de apoyo de la Junta. "Las empresas de hostelería y turismo representan el 12 por ciento del PIB autonómico, mantienen cerca de 100.000 empleos, y su actividad resulta también determinante para la supervivencia de sectores relacionados, como la industria agroalimentaria, la comercialización de productos del canal Horeca o la producción agropecuaria. Son muchas, por tanto, las razones que motivan la necesidad del máximo apoyo por parte de nuestro Gobierno autonómico", indicaban en su comunicado.
No obstante, las críticas de los hosteleros se intensifican en el plano municipal. Martín Méndez valora positivamente el anuncio de que no se vaya a cobrar la tasa de terrazas, pero lamenta que todavía no haya sido publicado "en ningún lado".
Desde Hostelería de León también se han mostrado críticos con la remodelación de la avenida Ordoño II en el contexto actual de crisis económica. "Consideramos que la reurbanización de Ordoño II no es un gasto prioritario. Es más importante salvar empresas", valora Martín Méndez.
Por el momento, los bares siguen a la espera de entrar en la 'Fase 1'. A partir de entonces, todos ellos abrirán un nuevo frente, el de la supervivencia.