De acuerdo con los datos de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) recogidos el lunes, la pasada los embalses ganaron 24,6 hectómetros cúbicos. Villameca, Riaño, Porma y Barrios de Luna suman 174,6 hectómetros cúbicos, lejos de los 452 que se registraban hace una año y de los 522 de la media de los últimos diez años. En términos porcentuales, la reserva está al 13,5%, cuando en las mimas fechas de 2016 estaba al 32,8%, por debajo también de la media de la última década del 40,3%.

En Barrios de Luna la entrada media es de 13 metros cúbicos por segundo frente a los 1,5 de salida. Durante la pasada semana cayeron 80 litros por metros cuadro y en lo que va de año hidrológico se han recogido 188,2. Con ello, el embalse más ‘delicado’ para los regadíos de la provincia ha logrado sumar siete hectómetros cúbicos a su reserva, que actualmente es de 20,8 hectómetros cúbicos, 70 por debajo de la media de los últimos diez años.
En cuanto al embalse del Porma, las aportaciones están siendo más modestas que en el Luna y en Riaño con unos 9 metros cúbicos por segundo de entrada. La salida es de 2,2 metros cúbicos por segundo y el agua embalsada llega a los 52 hectómetros, la mitad que el año anterior en estas mismas fechas. No obstante, cabe recordar que parte del agua embalsada a comienzos del pasado año hidrológico correspondía al ahorro de agua durante la campaña de riego y que en buena medida ha permitido salvar la campaña en algunas comunidades de regantes. En el caso del Porma, en lo que va de año hidrológico se han recogido 213,3 litros por metro cuadrado.
Por último, el embalse de Villameca, del que también se abastece la ciudad de Astorga, cuenta con tan solo 2,3 hectómetros cúbicos. En este caso las entradas son menores pero la nieve caída en la zona, 2,5 litros por metro en la semana pasada, hace pensar que la situación mejorará.