Los funcionarios de Villahierro alzan la voz: "no queremos que nos peguen en la prisión"

Han cortado el tráfico frente a la Subdelegación del Gobierno para pedir la dimisión de Virginia Barcones y reclamar "disciplina" y más medios, ya que hay sólo un funcionario para cada 85 internos

David Iglesias y Laura Pastoriza
05/05/2023
 Actualizado a 05/05/2023
frame-5mansilla.jpg
frame-5mansilla.jpg
Los funcionarios de prisiones están en pie de guerra tras el motín ocurrido el pasado martes en la cárcel de Villahierro. Esta mañana se han concentrado frente a la Subdelegación del Gobierno en León al grito de “Barcones dimisión”. Y es que el descontento de los sindicatos por su situación laboral se ha incrementado después de que la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, le restase importancia al asunto.

No han dudado en acusarla de "banalizar" con el incidente y la han invitado a visitar el centro penitenciario de Mansilla. "Lo que tiene que hacer antes de opinar es informarse y visitar la cárcel y los módulos conflictivos, cuando venga, la acompañaremos", en palabras de Herminio Juan (CSIF)

Su creciente descontento se ha materializado con un centenar de manifestantes ante las puertas de la Subdelegación, donde además de pedir la dimisión de la delegada del Gobierno, han denunciado que se sienten "indefensos" en la cárcel. "Venimos a trabajar por un sueldo digno y lo que no queremos es que nos peguen en la prisión", ha denunciado Félix Alonso, de la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip) que ha reclamado "disciplina y medios" y que les "dejen trabajar".  

"De un año a otro se han multiplicado por cinco las agresiones y hay solo un funcionario para 85 internos, es imposible controlar así la prisión", ha añadido Fernando Martínez, delegado de la Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones (APFP). También ha lamentado que faltan médicos, porque han pasado de tener diez a tres.

La situación ahora en el módulo 10 de la prisión donde ocurrió el motín es de calma tensa. Han explicado que no se controló hasta el miércoles a mediodía cuando fueron aislados los seis protagonistas del incidente. Han sido trasladados a otros centros cuatro de ellos, y quedan dos pendientes de salir.

Ante el aumento de agresiones en los últimos años, han criticado la gestión de la actual dirección de la prisión a la que tildan de ejercer "buenismo". Por eso reclaman disciplina para poder garantizar la seguridad en la prisión. "Algún día vamos a tener una desgracia y no será por no avisarla", ha avisado Herminio Juan, del sindicato CSIF.

Los sindicatos con representación en el centro penitenciario de Mansilla se han reunido con el subdelegado del Gobierno en León, Faustino Sánchez, quien ha escuchado sus reivindicaciones y les ha trasladado que sí son incidentes de gravedad, algo que comunicará al Gobierno.

Las conclusiones de la reunión terminaron sin mayor acuerdo y a su término, los trabajadores se han vestido con camisetas blancas pintadas simulando sangre y han cortado el tráfico en la plaza de la Inmaculada. A gritos, envueltos entre bengalas de humo y con una banda sonora violenta de pirotecnia han reclamado medidas para terminar con las agresiones y han reiterado su deseo de ser reconocidos como agentes de autoridad

Los manifestantes han lanzado petardos y algunos han alcanzado a los compañeros de prensa, en el ejercicio de su trabajo y cubriendo su propia convocatoria. Ante la violencia creciente que demostraba parte de los manifestantes, algún compañero de los medios de comunicación ha decidido abandonar el lugar.
Lo más leído