Los trabajadores de Vestas continúan su reivindicación en la sede de la empresa

Los trabajadores de Vestas, tras decidir esta semana continuar con la huelga indefinida a causa del posible cierre de la fábrica ubicada en Villadangos del Páramo, acuden a la sede de la empresa en Madrid. La huelga dura ya tres semanas y las soluciones no llegan, de hecho este lunes se rompían la negociación con la dirección de la compañía.

A falta de avances en la negociación y de la reunión con la máxima autoridad en materia energética, tres trabajadores mantiene su encierro en la sede de la Oficina Territorial de Trabajo para presionar ante los planes los de empresa de liquidar cientos de empleos para su deslocacalización a China. Estas circunstancias que viven actualmente los trabajadores de la fábrica en León son drásticas y la situación es «muy complicada y cansa mucho estar aquí, llevamos ya seis días encerrados, ver a tu familia por la ventana. Pero más duro son los días negociando diez horas con la empresa para que al final te digan que se levantan por el último céntimo. Vamos a dejar a 300 y pico familias en la calle por unos euros porque al final son unos euros», denunciaba Pablo Martínez de UGT.  

El martes pasado los trabajadores decidieron continuar con la huelga en lugar de optar por las vacaciones para seguir reivindicando los cientos de puestos de trabajo que se perderían al cerrar la fábrica.  

Tras tomar esta decisión y el infructuoso resultado de la reunión con la dirección de la empresa, los trabajadores leoneses apuntan que desconvocarán la huelga solo en caso de que se «llegue a condiciones adecuadas», recalcaba Francisco Romero de UGT a la salida de la reunión.  

Hoy los trabajadores van a Madrid para continuar su petición. Allí les recibirá el director general de Industria del Ministerio de Industria.

A su llegada hoy a  la capital, los trabajadores de Vestas organizan una concentración de la plantilla ante la sede de la multinacional danesa en Madrid (calle Serrano Galvache, 56) desde las 10:30 horas.

Además, una representación del comité de empresa se reunirá en Madrid con representantes de la compañía. Todo ello mientras la parte social espera la fecha para reunirse con la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribero, y plantearle posibles soluciones a medio y largo plazo.

Es una de las últimas esperanzas de la plantilla de la fábrica de aerogeneradores, que se podría trasladar a China tras años siendo el modelo de la compañía en Europa.