No hay lluvia ni viento que impida que Melchor, Gaspar y Baltasar cumplan con su misión de cada Navidad: llenar de ilusión y magia todos los rincones por los que pasan. Sobreponiéndose también a este clima desfavorable, Sus Majestades de Oriente llegaron este domingo al alfoz de León para alegría de los niños y niñas de municipios como Villaquilambre.
Los Reyes Magos llegaron en un tren fletado desde Oriente especialmente para la ocasión. La delegación real se bajó en el apeadero de La Raya, donde Sus Majestades recibieron una calurosa bienvenida de los niños y niñas del municipio hacia las 15:50 horas.
Sin embargo, la apretada agenda que los Magos de Oriente tienen en estos días obligó a que no pudieran detenerse demasiado. Así, a las 16:00 horas llegaron puntuales al recibimiento oficial por parte del Ayuntamiento de Villaquilambre, representando por el alcalde Jorge Pérez Robles. Como ya es toda una tradición en el municipio del alfoz, al entrar en el salón de plenos de Villaquilambre se les hizo entrega de unas llaves mágicas que ayudarán a que durante la noche cumplan con su cometido y repartan regalos en las diez localidades: Canaleja de Torío, Castrillino, Navatejera, Robledo de Torío, Villamoros de las Regueras, Villanueva del Árbol, Villaobispo de las Regueras, Villaquilambre, Villarrodrigo de las Regueras y Villasinta de Torío. Gracias a las fuerzas de los vasos de leche con galletas que dejan las familias, los Reyes Magos podrán recorrer cada una de ellas hasta altas horas de la madrugada.
Por la tarde, Melchor, Gaspar y Baltasar también visitaron estas localidades en una cabalgata que dio comienzo a las 16:30 horas. Para llegar a todos los niños y niñas del Ayuntamiento, los pajes se emplearon a fondo y organizaron un doble recorrido que culminó con unas grandes fiestas en el Colegio Los Adiles y la Casa de la Cultura de Villaquilambre.