Mañueco quiso contradecir al grupo socialista por sus críticas sobre las políticas sanitarias en Castilla y León que considera el discurso de “unos apóstoles apocalípticos”.
El presidente rompió una lanza por la sanidad en el mundo rural, “que vamos a mejorar”. A ello sumó, en cuanto a educación, el compromiso de mantener las escuelas con menos de tres niños, también mantener las ayudas a las familias para conciliar y, en cuanto a la políticas de mayores, combatir la soledad “una de las lacras de la sociedad moderna”.
Mañueco apostó también por implicarse con la industria agroalimentaria, la manufacturera y el sector servicios “estoy convencido que el Bierzo, que atraviesa una etapa difícil, con el liderazgo del PP, va a salir adelante”, dijo, con un discurso de esperanza, al que unió el compromiso de la mejora de las telecomunicaciones en todo el espectro castellano y leonés “queremos que internet llegue a todos los rincones”, dijo. El presidente se comprometió a plantear una alternativa al cierre de las minas “no como los que las están cerrando”. Mañueco se posiciona como la fuerza de “futuro, de esperanza, de empleo y oportunidades” frente a los que “no han creído nunca en esta tierra”.
En cuanto a los nuevos comicios que justificó en“el falso diálogo simulado con sus socios” de Pedro Sánchez, cuando “lo que quería era repetir las elecciones para sacar más diputados , asegura que “nos ha engañado pero le va a salir el tiro por la culata”. Augura una subida de impuestos si Sánchez sigue su compromiso de presupuestario de más de 11.000 millones de euros “gastar mucho sin crecimiento económico es la ruina de un país”, apunta. “Le tenemos que demostrar que así no se ganan las elecciones y le vamos a dar la espalda para estar de la mano de Pablo Casado”.
Convertir la desgana y el hartazgo ante las elecciones en ilusión, pide que sea la fórmula “explicando nuestro programa y comunicando con la gente desde la moderación”. Reconoce que es un momento propicio para el PP “tenemos la actitud para cambiar de rumbo en nuestro país. El 10 de noviembre queremos que España sume con el PP”. Por eso aplaudió el evento de aniversario berciano, con el sentido de recuperar el espíritu de los fundadores que el 24 septiembre del 1979 lideraron un nuevo proyecto. En ese momento, Tomás González Cubero era nombrado el primer presidente de Alianza Popular y presidía el acto el histórico Manuel Fraga.
En el acta fundacional decía que la juventud creaba su propio equipo y Fraga decía lo importante que era el Bierzo en el PP y de tener un partido fuerte y unido. Asegura que ese es un mensaje que sigue “más vivo que nunca. Tenemos que crear equipos con gente joven, el Bierzo es clave para el PP y el partido tiene que estar más fuerte y unido que nunca”.En ese sentido, y como quiso abrir su discurso, fue lanzando un mensaje de apoyo a los que en Cataluña “no quieren esa violencia que están sufriendo. Un respaldo a las fuerzas de seguridad y censurar la actitud del presidente de la Generalitat que no está a la altura de Cataluña”.
Un partido unido
El presidente comarcal del partido, Raúl Valcárcel aprovechó la presencia de Mañueco para solicitarle un esfuerzo “en políticas activas más que nunca”, para servir de colchón a la crisis minera. “no queremos subvenciones sino esas políticas para desarrollar el sector industrial, agroalimentario y servicios, los tres pilares que considera fundamentales. Valcárcel felicitó a Mañueco por ser un presidente salido del “trabajo y el esfuerzo, ese es su aval para dirigir el destino de Castilla y León los próximos cuatro años”. El presidente comarcal del PP quiso aclarar ante Mañueco que el partido “está más unido que nunca alrededor de tu figura”.
Se preguntaba el alcalde de Carracedelo qué sería si cerrara las térmicas un gobierno del PP. “Seguro que habría manifestaciones todos los días”, dice, por lo que pide a los sindicatos de clase el mismo trato. “Es la suma del despropósito que siempre reina cuando gobierna el PSOE”, reconoce.
Para Valcárcel la clave está en “tener el partido vertebrado y unido”, para lo que pidió a sus compañeros, casi 400 en la comida homenaje que se celebró en Carracedelo, que sean “agentes electorales para intentar darle la vuelta a las elecciones el 10 de noviembre. Si lo hacemos tendremos el mejor aval ante el presidente”, remarcó.
Por su parte, el presidente provincial del PP, Juan Martínez Majo, recordó a las 12 personas que figuran en el acta fundacional del PP berciano y el avance del partido desde entonces “gracias al esfuerzo de ellos y a los que vinieron después para luchar por unas ideas de centro derecha del PP”.
Para Majo el Bierzo es una tierra “inquieta, llena de ideas, que camina hacia el progreso”, pero desde una situación de crisis, como la del carbón “todos queríamos una transición pacífica y ya nos han cerrado hasta las térmicas”. Por eso pide políticas de empleo y que generen actividad “desde Madrid podremos conseguir que eso sea así”, comprometió. Asegura que en León son 152.000 los votantes de centro derecha frente a 120.000 de izquierdas, por lo que pide que “hagamos el efecto dominó” para seguir conquistando voluntades, lo que considera que será la forma de mejorar los resultados electorales y superar al PSOE en la provincia “como hemos hecho en el pasado”. Augura que si Pedro Sánchez sigue en la Moncloa “estaremos en la crisis más profunda que hayamos vivido.