González aspira a convertir a la ULE en "faro de conocimiento" y "motor de progreso"

Mañueco propone una reunión con todos los rectores de las universidades públicas para "facilitar el consenso" para la implantación de nuevos grados, como es el caso del de Medicina

R. Álvarez y Laura Pastoriza
18/06/2024
 Actualizado a 18/06/2024
https://youtu.be/-wdtpmCrieQ

Nuria González es ya la nueva rectora de la Universidad de León, la primera mujer en ocupar este cargo en una universidad pública de Castilla y León y también la primera en ceñirse el birrete negro –tras la entrada en vigor de la Losu– para hacer frente a un único mandato de seis años de duración. Este martes tuvo lugar su toma de posesión, en la que González dijo asumir el cargo «con motivación e ilusión», la misma que ella y su equipo quisieron transmitir durante la campaña, y convencida de que la ULE debe convertirse en «agente de transformación social, motor de progreso local y faro de conocimiento» y de que «la innovación y la excelencia» deben ser «los valores que sustenten» cada paso en su andadura. 

La nueva rectora agradeció la labor de quien la precedió en el cargo, Juan Francisco García Marín, su «arduo trabajo en tiempos difíciles» y el haber logrado situar a la Universidad de León en el lugar en el que está, en el que recordó que le sonríen los resultados de múltiples rankings. No se conformará con esto, dijo, apostando por mirar al futuro «con ilusión» por esos «logros conseguidos», pero convencida también de que son muchos los que les «aguardan en el camino». No olvidó citar en su discurso la que ya durante la campaña se convirtió en su principal reivindicación: que la Universidad de León pueda implantar el grado en Medicina. Nuria González aprovechó la presencia del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, para insistir en que esta petición es «justa» y en que «ha llegado el momento de darle cumplimiento». 

El presidente respondió y, aunque consideró «legítimas» las aspiraciones a impartir nuevos grados, destacó que siempre han entendido que para ello «hay que cumplir dos requisitos». El primero lograr «el consenso de las universidades públicas», que consideró que «actualmente no existe», y el segundo disponer de «un proyecto viable», que entendió que tampoco se tiene. Sin embargo, advirtió que ahora que se está cerrando el «círculo electoral» –al que se refirió por error como «circo»– puede ser el momento de «dar pasos firmes» y propuso para ello una reunión con todos los rectores «para facilitar el consenso en esta materia».

También el rector saliente, Juan Francisco García Marín, hizo referencia en su intervención a la lucha por conseguir Medicina como una tarea «pendiente» y confió en el «buen entendimiento» entre el nuevo equipo de Gobierno de la Universidad y la administración autonómica para poder «desatascarlo». García Marín deseó suerte a la nueva rectora «convencido» de que su labor será «excelente». «Una universidad no se resume en el mandato de un solo rector, sino que es la consecuencia de la dedicación y del empeño de todos ellos», advirtió para indicar que si hace años la ciudad «tenía una universidad, ahora creo sinceramente que León es una ciudad universitaria y estoy seguro de que Ponferrada terminará siéndolo». Ahora que su mandato ha concluido afirmó sentirse «especialmente orgulloso» de algunos de los pasos dados durante él, como «los planes de atracción y contratación de profesorado joven, del programa de excelencia y de los planes de estabilización de los mismos». Valoró también el trabajo realizado de cara a la internacionalización del centro y estuvo de acuerdo en que «una universidad que no aprecie, valore y estimule la investigación está condenada a la mediocridad». 

"Honrar el legado"

Tras el discurso del rector saliente, al que Nuria González hizo entrega de una insignia laureada que pidió que mostrara «con orgullo» por ser «el símbolo de nuestra universidad», la nueva rectora recibió los atributos (birrete, muceta y toga) ante la atenta mirada de quienes ocuparon el cargo antes que ellos, los exrectores Juan Manuel Nieto Nafría (1986-1990), Julio César Santoyo Mediavilla (1990-2000), Ángel Penas Merino (2000-2008) y José Ángel Hermida Alonso (2008-2016), a los que agradeció su presencia y trabajo y a los que prometió poner todo su empeño para honrar su legado y convertir a la ULE en «una institución aún más competitiva en su oferta formativa y en sus actividades de formación y de transferencia, así como en un referente cultural para la sociedad». Se dirigió a su equipo, con el que dijo estar ya «trabajando para impulsar medidas» que van a priorizar en estos primeros meses de mandato y remarcó también que tal vez este 2024 pueda ser recordado en la Universidad de León «como el año de las mujeres». Su nombramiento abre camino pero, además, recordó que hace apenas unos meses que la Universidad nombró también a su primera doctora Honoris Causa, la investigadora Laura María Lechuga, «enormemente reconocida en su campo». «Poco a poco el mundo está cambiando», advirtió, y añadió a modo de cita las palabras de la activista Malala Yousafzai «todos no podemos avanzar si la mitad de la humanidad va por detrás».

La ULE, "pieza clave"

Además de responder a la petición de implantar el grado en Medicina, el presidente de la Junta advirtió en su intervención que la Universidad de León es una «pieza clave» dentro del sistema universitario de Castilla y León y que en ella se ofertan estudios «únicos» como los de Veterinaria o Ingeniería Aeroespacial, así como otros «destacados» como Ciencias del Deporte o el grado en Ingeniería de Datos e Inteligencia Artificial. Fernández Mañueco citó la «calidad» como «una de las grandes fortalezas» del sistema universitario de la comunidad y dijo que estas son el «combustible esencial para el progreso» así como el «motor del estado de bienestar». Recordó que siguen reclamando una Ebau «única en España» y aseguró sentirse «muy satisfecho» respecto a la colaboración entre la Universidad de León y el Gobierno de Castilla y León, que subrayó que seguirán «intensificando». Fernández Mañueco también presumió de datos, como de la financiación que se aporta a estos centros, así como del número de plazas para docentes, investigadores y alumnos. Según dijo, se ha reforzado la igualdad mediante la reducción de tasas, se han incrementado las cuantías de las becas y se han creado nuevas modalidades, como las de aprovechamiento académico para estudiantes de máster.

En lo que respecta al impulso de la investigación universitaria, recordó que el Ejecutivo autonómico ha destinado más de 37 millones de euros para que las universidades sean «foco de atracción de investigadores de alto impacto». «La excelencia del sistema universitario es posible» –consideró– en gran medida, «gracias a que la Comunidad cuenta con la mejor educación de España y una de las mejores del mundo, que hace que los alumnos lleguen a la universidad con una preparación de primera», advirtió el presidente de la Junta. 

Lo más leído