La encuesta de ocupación en alojamientos turísticos extrahoteleros, publicada este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) reflejan que el número de viajeros que se alojaron en este tipo de establecimientos se situó en 12.012, lo que supone un descenso de 4.862 y de un 28% con respecto a los 16.874 que se habían contabilizado en julio del pasado año.
Sin embargo, el comportamiento de los datos referidos a pernoctaciones es bien diferente, de lo que se deduce que aquellos turistas que se han decantado por el medio rural durante el mes de julio han pasado más tiempo en sus alojamientos, quizá por el tirón que han experimentado los pueblos como destinos más seguros este verano ante la actual situación de crisis sanitaria.
En este sentido, los datos del INE reflejan un total de 37.536 pernoctaciones en los alojamientos rurales de la provincia de León durante el pasado mes de julio. Ello implica un incremento de un 9,4% y de 3.253 en comparación con las 34.283 que se habían registrado durante el mismo periodo de 2019. Se trata del dato más elevado de un mes de julio en toda la serie histórica del INE, que arranca en el año 2005.
Estas cifras dejan una estancia media de 3,12 días en las casas y centros de turismo rural de la provincia de León, dato que es también el más elevado de la citada serie histórica y que supera ampliamente a la que se había registrado en julio del año pasado (2,03 días).
Aletur:"Para pagar deudas"
El secretario de la Asociación Leonesa de Turismo Rural (Aletur), Jesús del Río, muestra cierta sorpresa ante los datos facilitados por el INE, puesto que no coinciden con las sensaciones pulsadas entre los propietarios de los alojamientos de la provincia. «En los 150 establecimientos que forman parte de nuestra asociación hay muchos que han empezado a trabajar con cierta regularidad a mediados de julio y solo han estado llenos los que disponen de piscina», señala Del Río antes de avanzar que la ocupación ha sido de un 70% en agosto, lo que supone «uno de los peores veranos», puesto que en este mes «superamos ampliamente el 90%». Además, el secretario de Aletur asegura que los brotes del virus han elevado las cancelaciones tanto en la última semana de agosto como para el mes de septiembre. «Con independencia de que los datos se ajusten más o menos a la realidad, los resultados de estos dos meses nos van a valer solo para pagar las deudas que tenemos atrasadas, porque nos perdonaron los autónomos, pero durante los meses del cierre seguimos pagando la luz, la publicidad, la conexión a internet, la basura o el IBI. Si en otoño nos vuelven a cerrar, apaga y vámonos», concluye.Cabe recordar que en la provincia de León hay un total de 430 alojamientos rurales que generan 641 empleos.
Mientras, las pernoctaciones en alojamientos de turismo rural crecieron en Castilla y León el pasado mes de julio un 13,2%, frente a la caída nacional del 9,9%. Se registraron de 235.465 pernoctaciones, frente a las 207.967 del mismo mes de 2019, mientras que en el conjunto de España se perdieron más de 162.000, hasta 1,4 millones. Castilla y León se situó en cabeza, por delante de Asturias (218.504), Andalucía (169.118), Cataluña (167.866) y Cantabria (103.125).