En el alto del Cerro de Puente Castro, junto al antiguo depósito de agua, la Judería medieval de León sale de nuevo a la luz este verano. El proyecto arqueológico iniciado en 2021 por la Universidad de León regresó el pasado día 9 a unas ruinas que permanecen ahí todo el año, ocultas bajo tierra, pero que en el mes de julio revelan sus secretos en forma de muros, calles y cantos rodados. No obstante, este es uno de los yacimientos medievales más relevantes del noroeste y el objetivo es desentrañar lo que esconde para aprender cómo vivían los hebreos que decidieron asentarse a las afueras de León hasta que fueron expulsados por las tropas de Castilla.
Entre los siglos X y XII, el alto de Puente Castro fue un poblado judío, que "realmente no era un gueto, sino un barrio", porque las investigaciones realizadas hasta ahora por la Universidad apuntan a que la población hebrea de aquella época "podría haber convivido también cristianos", según explica en un descanso de los trabajos uno de los dos responsable de la excavación, el profesor de Historia de la ULE Carlos Fernández. "No es cuestión de correr, sino de documentar bien lo que sale", añade. Bajo el intenso calor de julio, allí trabajan desde las ocho de la mañana hasta las dos de la tarde más de 30 estudiantes de la Universidad de León y otros procedentes de la Universidad de Santiago. El objetivo de las excavaciones es ampliar el conocimiento que se tiene sobre la civilización judía que vivió en el entonces Reino de León, pero a la vez permitir a los universitarios un espacio próximo a la capital leonesa para realizar prácticas.
Entre ellos está Carolina, estudiante del Máster de Arqueología en la Universidad de Santiago de Compostela, que vio "una oportunidad interesante" para realizar sus prácticas. Junto a ella, compartiendo las labores de cribado de los materiales que iban extrayendo del Castro Judío, el estudiante del doble grado de Historia e Historia del Arte en la Universidad de León, Pedro, cumple su cuarto verano participando en esta iniciativa arqueológica. "Me quiero dedicar a la docencia y esta es una buena forma de profundizar en la investigación", dice.
Objetos encontrados
Armados con pico y pala, los arqueólogos en prácticas y los profesionales sacan tierra y revelan muros e incluso una antigua calzada de piedra. Además, confían en encontrar algo especial, pues en años anteriores, se han topado con objetos tan interesantes como un dado o unas vieiras perforadas. "Son elementos puntuales, que no tienen que ver con los judíos, por lo que nos lleva a pensar a un intento de sacralización por parte de los cristianos", explica Fernández.
Unas excavaciones que comenzaron en 1998, pero que se detuvieron unos años después. La ULE decidió volver allí en 2021, con el apoyo del Ayuntamiento de León que es la institución responsable del terreno, para seguir investigando y ofrecer un aprendizaje estival a los alumnos. «Este lugar, la parte alta, es singular, porque normalmente suelen estar mezclados los materiales de judíos y cristianos, pero aquí se conserva la estructura judía», añade el profesor.
Las excavaciones se extenderán hasta final de mes, en colaboración con un amplio equipo de investigadores del Departamento de Historia y del Instituto de Estudios Medievales, que analizan en el campus los objetos encontrados. A partir de la interesante información recabada en los tres anteriores años, los arqueólogos se centran este verano en «ampliar los sondeos abiertos en 2023, para potenciar la visión de conjunto del entramado urbano de la judería».
¿Quién financia esto?
Estas intervenciones se enmarcan dentro del proyecto de investigación ‘La minoría judía medieval en el ámbito urbano del Reino de León: análisis arqueológico y documental’, financiado por la ULE, con el apoyo económico de del Instituto de Estudios Medievales de la Universidad de León y de la Concejalía de Acción y Promoción Cultural del Ayuntamiento de León. "Hasta hace dos años también recibíamos una pequeña subvención de la Junta, pero la actual Consejería no nos apoya", añade Carlos Fernández, quien junto a la profesora Raquel Martínez llevan ya cuatro años buscando el origen judío de Puente Castro.
La Judería ‘guadiana’ no será un museo
"Esto no es Lancia, la musealización aquí es difícil", explica el codirector de las excavaciones, porque "los materiales constructivos son cantos rodados y consolidar las estructuras tendría un coste excesivo". La ULE sí que contempla, sin embargo, otras formas de musealización digital, mediante códigos QR e información web para dar a conocer la Judería ‘guadiana’ de León, que sólo se ve en el mes de julio.