"No olvidéis que lo realmente importante es llegar"

‘No corras, no bebas, no cambies de ruedas’. Es el lema de la campaña impulsada por Aspaym, una asociación de personas con lesión medular y otras discapacidades físicas, para concienciar a los conductores de los riesgos que entraña superar la velocidad permitida cuando nos ponemos al volante.

La iniciativa ha llegado este miércoles a la provincia de León, concretamente a la carretera N-120 a la altura de Villadangos del Páramo. Allí se ha instalado un control de la Guardia Civil de Tráfico con presencia del subdelegado del Gobierno, Faustino Sánchez, el jefe provincial de Tráfico, Gonzalo León, y el teniente coronel jefe de la Guardia Civil en la Comandancia de León, Julio Andrés Gutiérrez.

Pero la protagonista era Sara Aller. Hace casi siete años sufrió un accidente de tráfico y quedó en una silla de ruedas al perder buena parte de la movilidad de su cuerpo. Esta joven, que forma parte de la selección española de boccia, ha sido la encargada de explicar a los conductores parados por los agentes la importancia de respetar los límites de velocidad. “Ir más deprisa de lo debido supone un riesgo muy grande. Debemos tener todos los sentidos puestos en la carretera, porque un mínimo despiste puede hacer que tengamos un accidente. Puede pasarte en cualquier momento y por eso es importante que vayamos despacio y respetemos las normas de tráfico al 100%. Espero que mi situación sirva para que la gente se conciencie. Solo con una persona que lo haga me doy por satisfecha, porque no quiero que a nadie más le pase lo que a mí. No por ir más deprisa vamos a llegar antes. Y lo verdaderamente importante es llegar”, ha comentado Sara.

Por su parte, el subdelegado del Gobierno ha explicado que esta campaña de Aspaym coincide con el refuerzo que esta semana lleva a cabo la Dirección General de Tráfico (DGT) en los controles de velocidad. En este sentido, ha recordado que en uno de cada cuatro accidentes mortales está presente el exceso de velocidad. “El riesgo de morir atropellado es de un 10% si el vehículo va a 30 kilómetros por hora, pero sube a un 90% si la velocidad es de 50 y es prácticamente imposible salvarse si circula a 80”, ha indicado Sánchez antes de recordar que las carreteras de la provincia se han cobrado ya este año 14 víctimas mortales.

El subdelegado ha explicado que la distancia de frenado se incrementa si circulamos a más velocidad de la permitida y que llega a las dimensiones de un campo de fútbol si se circula a 120 kilómetros por hora. Además, ha recordado que las sanciones administrativas van de 100 a 600 euros y de dos a seis puntos. En caso de que la infracción sea considerada delito (60 kilómetros por hora sobre el límite permitido en vías urbanas y 80 en interurbanas), puede haber penas de prisión, multas económicas o trabajos en beneficio de la comunidad, además de la retirada del carné entre uno y cuatro años.

Sánchez ha hecho especial hincapié en la importancia de respetar los límites de velocidad en las carreteras convencionales, que registran numerosos desplazamientos en época estival. “No solo tenemos que estar pendientes del viaje hasta el lugar de vacaciones, sino también de los pequeños desplazamientos que hacemos allí. “El límite es de 90 en vías interurbanas y de 30 y 50 en las urbanas en función de que tengan uno o dos carriles por sentido. No se ponen por capricho, sino porque tienen más curvas y cruces a nivel. Por eso apoyamos estas campañas, porque es necesario que la gente se conciencie de los riesgos que implica la velocidad”, ha concluido el subdelegado del Gobierno.