Nuevas declaraciones apuntan a que podían haberse adoptado más medidas para evitar el accidente de la Vasco

Este martes han continuado las declaraciones ante el juez dentro de la fase de instrucción para esclarecer los hechos del accidente que, hace mañana dos años, costó la vida a seis mineros e hirió a otros cinco en el Pozo Emilio. Por las dependencias judiciales de León pasaron este martes técnicos de minas e ingenieros que elaboraron el informe de la empresa, cuyas declaraciones han apuntado a que podían haberse adoptado más medidas para evitar el fatal accidente.

Los técnicos ratificaron ante el juez que las tareas en las que se encontraban trabajando los mineros fallecidos se hacían a diario, algo que debería haber estado “más controlado”, según explicaron a Ical fuentes judiciales. Mientras tanto, en las declaraciones de los ingenieros se produjeron algunas contradicciones porque sus palabras de que el accidente había sido imprevisible se contradecían con el resultado final del informe.

Ante las preguntas de los abogados se puso de manifiesto algunos hechos como que “no todo era normal”, que había una bóveda descontrolada e incluso de que había indicios que apuntaban a que podía producirse un accidente, por lo que habría sido necesario la adopción de mayores medidas de seguridad. Por el momento no hay fecha para nuevas declaraciones ante el juez, aunque sí se espera que este mismo año pueda cerrarse la fase de instrucción de este caso.