La relevancia que sectores como el tecnológico o el biofarmacéutico han ido adquiriendo durante los últimos años en el tejido productivo de la provincia de León se sigue traduciendo en buenas noticias para el mercado de trabajo. Y para muestra, el botón que representa ya desde hace algunos años el Parque Tecnológico, que cuenta actualmente con un total de 42 empresas instaladas que al cierre de 2023 año habían logrado superar ya los 2.000 empleos y los 215,3 millones de euros de facturación.
Así se desprende de los datos aportados a este periódico desde la Consejería de Economía y Hacienda de la Junta de Castilla y León, encabezada por Carlos Fernández Carriedo.
Concretamente, el número total de puestos de trabajo asciende a 2.066, de los que 1.985 serían directos y los 81 restantes corresponderían a empresas que prestan servicios auxiliares en el funcionamiento y mantenimiento del Parque Tecnológico de León.
Estos datos contrastan con los referidos a 2015, ya que entonces había únicamente 15 empresas con 708 empleos directos y 83 indirectos, lo que dejaba por lo tanto una cifra total de 791.
La edad media de los trabajadores del Parque Tecnológico se sitúa en unos 35 años, mientras que un 55% de las personas que trabajan actualmente en este recinto industrial tienen una titulación universitaria vinculada a las principales actividades que desarrollan las empresas instaladas.
En este sentido, es preciso detallar que –pese a estar hablando del Parque Tecnológico– es el sector químico y farmacéutico el que más empleo y facturación genera actualmente a través de su decena de empresas. Concretamente, los datos facilitados por la administración autonómica reflejan 992 puestos de trabajo (casi la mitad del que generan todas las empresas instaladas en el recinto) y un volumen de negocio que durante el pasado año rozó los 164,3 millones de euros (tres cuartas partes de la facturación global).
Mientras, el sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación, conocido como TIC, cuenta con 17 empresas que generan 817 puestos de trabajo en el Parque Tecnológico de León y facturaron el año pasado algo más de 17 millones de euros.
Por su parte, las 11 empresas de ingeniería generan 159 empleos y su volumen de negocio anual roza los 33 millones de euros, siempre según la estadística que maneja la Consejería de Economía y Hacienda de la Junta.
El listado se completa con cuatro empresas de servicios que tienen 18 trabajadores y facturaron durante el pasado año algo más de un millón de euros.
Con sus 32 hectáreas de superficie ocupadas prácticamente en su totalidad, desde el departamento que encabeza Fernández Carriedo reconocen el escaso margen de crecimiento en número de empresas y empleo que tiene el Parque Tecnológico.
Las claves de la ampliación
En todo caso, cabe recordar que la Junta sigue trabajando en colaboración con el Ayuntamiento de León para ejecutar su ampliación. La idea inicial de la administración autonómica era que estuviese lista a lo largo del pasado año, cuando el recinto empresarial cumplía 15 años desde su inauguración oficial.
Sin embargo, los trámites se han ido demorando debido a los trámites burocráticos y las catas arqueológicas que hubo que realizar en busca de vestigios romanos en la zona.
En todo caso, el proyecto servirá para que la superficie pase de 32 a 79 hectáreas y estará financiado íntegramente por la Junta a pesar de que inicialmente un 20% iba correr a cargo del Ayuntamiento de León para financiar la expropiación de los terrenos.
Este proceso administrativo está ya en su recta final –se ha convocado a los propietarios de las fincas para firma de las actas de ocupación entre el 24 de abril y el 6 de junio– y eso permitiría posteriormente la licitación de las obras, que supondrán una inversión de 12 millones de euros (IVA incluido) y se ejecuta a través de un Proyecto de Interés Regional que gestiona la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente (Somacyl). El objetivo es que los trabajos puedan comenzar en el tramo final del año con la vista puesta en la primavera de 2026.
Además de la urbanización de nuevo suelo de uso empresarial (285.641 metros cuadrados con 314.215,80 de edificabilidad), las obras conllevan la realización de varios viales entre los que destaca uno de doble carril por sentido que enlaza con la rotonda que da acceso a la ronda sur (LE-30) y que no sólo va a permitir rápidamente la entrada y salida de la zona industrial, sino que va a enlazar la Oteruelo de la Valdoncina, terminando con el aislamiento en el que se encuentra esta pedanía de León.
Al margen de la ampliación, cabe recordar que el edificio de usos comunes del Parque Tecnológico tiene una superficie de casi 6.000 metros cuadrados que albergan oficinas en régimen de alquiler, además de la sede del Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León (ICE), cuyo director territorial es José Manuel Frade. Mientras, el resto de la superficie acoge un polo tecnológico y farmacéutico de primer orden. Investigación y desarrollo de procesos químicos y biológicos, fabricación de productos farmacéuticos, servicios de ingeniería, consultoría informática, análisis agroalimentario y medioambiental, tecnología de la información, consultorías, elaboración de productos biosimilares, gestión energética e instalación de redes y control de acceso aportan el grueso de la actividad empresarial que se desarrolla actualmente en el Parque Tecnológico de León.
Las empresas interesadas en instalarse en el recinto han de ser consideradas como innovadoras y de base tecnológica. Además, deben destinar el 5% de sus ventas brutas anuales a actividades de investigación y desarrollo y dedicar un mínimo del 5% de su personal al desarrollo de las mismas, por lo que se tratará de personal técnico cualificado.