Planas: "De cada gota de agua tenemos que sacar el mayor producto posible"

El regadío es clave para el futuro del sector agroalimentario en España, para aumentar la competitividad de las explotaciones y para que se garantice el relevo generacional. El Congreso Nacional de Regantes que se celebra durante esta semana en León ha puesto este viernes el broche de oro con la visita del ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas.

En su intervención ha insistido en la apuesta del Gobierno por un regadío sostenible. "El debate entre regadío sí o no que algunos pretenden desarrollar es absolutamente erróneo. El punto de vista del Gobierno es que en el contexto actual de cambio climático tenemos que ir hacia un regadío sostenible, que es el que puede dar seguridad a la producción sostenible de productos alimentarios", reivindicó. "Por eso hemos hecho del regadío sostenible una prioridad dentro de la inversión del Gobierno de España", destacó. En este sentido, aseguró que entre este año y el 2027 se van a invertir 2.137 millones de euros para regadíos, entre los fondos de recuperación, los presupuestos generales del Estado y los fondos de desarrollo rural.

Esa inversión dejará una media de 425 millones de euros cada año, "lo cual significa triplicar la cantidad de los 20 primeros años de este siglo, que ha sido una media de 133 millones de euros aproximadamente". Además, aprovechó para hacer hincapié en que Castilla y León será la comunidad con mayor presupuesto para esta modernización de regadíos, con 298,8 millones de euros y 19 actuaciones de las 130 previstas en toda España para este periodo.

En la clausura estuvo también presente el nuevo consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta, Gerardo Dueñas, quien aprovechó la presencia del ministro para reclamar una mayor regulación de la cuenca del Duero. "Somos la comunidad autónoma que tenemos menos porcentaje de superficie de regadío respecto a la superficie global que tenemos, la cuenca del Duero tiene que tener una mayor capacidad de regulación de la que tenemos ahora y se tienen que simplificar administrativamente muchos temas ambientales", reivindicó Dueñas. Sobre la regulación, aseguró que pasar del 31 % actual al 50 por ciento permitiría ganar entre 1.200 y 2.200 hectómetros cúbicos a mayores, que "son claves para seguir potenciando el regadío de Castilla y León".

Sin hablar de aumentar la regulación y sin valorar el nuevo Plan Hidrológico del Duero, Luis Planas apuntó que "tenemos el agua que tenemos y lo que hace falta es utilizarla bien. Mi preocupación como ministro de Agricultura es que nuestro regadío sea eficiente, es decir, de cada gota de agua tenemos que sacar el mayor producto posible y ese es el tema de fondo. Las opiniones son todas legítimas, habrá que buscar un mecanismo de consenso que nos permita gestionar mejor los caudales de agua". 

El congreso de Comunidades de Regantes, que ha reunido a cerca de un millar de personas en León, llega a su final sentando las bases de la agricultura del futuro. En el acto de clausura, junto al ministro Luis Planas y al consejero Gerardo Dueñas, han estado el alcalde de León, José Antonio Diez, la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, entre otras autoridades.