El pasado mes de julio estuvo marcado por la estabilidad de los precios en la provincia de León. Los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) reflejan además que la inflación del último año crece hasta el 1,6%, dato que sube tres décimas después de que en junio se hubiese registrado el más bajo de los últimos 28 meses, puesto que había que retroceder hasta febrero de 2021 para encontrar uno inferior (0,1%). Fue a mediados de ese año cuando comenzó una espiral inflacionista (debida fundamentalmente a la subida de la luz) que se agravó por la invasión de Ucrania por parte de Rusia a partir de febrero de 2022.
Los datos del Índice de Precios de Consumo (IPC) reflejan en todo caso que bienes de primera necesidad como los alimentos siguen registrando un encarecimiento significativo (un 1,1% en julio y un 11,3% en el último año).
Sin embargo, la mayor subida de precios se registra, coincidiendo con las vacaciones de la mayoría de los leoneses, en los paquetes turísticos, que han elevado sus tarifas un 16% en julio y un 26,8% en su evolución anual. También suben los alojamientos (+8,8% en el último ejercicio pese a abaratarse un punto en julio) y los servicios de restauración (seis décimas el mes pasado y un 7,2% en el dato anual)
Sin embargo, los bienes que protagonizaron el arranque de la espiral inflacionista siguen mostrando ahora caídas importantes en sus precios. La luz y el gas se han abaratado un 34,6% en el último año (en julio se encarecieron ocho décimas), mientras que el coste de la utilización de vehículos personales (que incluye los carburantes, los repuestos y los servicios de mantenimiento) se ha reducido un 7,5% pese a la subida de un punto anotada el mes pasado.