Es una de esas carreteras de la provincia de León en el que el paso de las máquinas quitanieves hacen mella, por lo que su estado es manifiestamente mejorable desde hace tiempo.
Los cuarenta vecinos que viven todo el año en la localidad de Redipollos, en el municipio de Puebla de Lillo, han recrudecido estos días sus quejas después de llevar cuatro años denunciando los importantes baches que pueden observarse en los dos kilómetros que cada día recorren para ir a trabajar, a hacer sus compras. Y el mismo problema tiene también el servicio de transporte que suele llevar a los más pequeños a clase en los centros educativos de Puebla de Lillo o de Boñar.
Hasta ahora, las soluciones provisionales han pasado por tapar los baches, pero la llegada del invierno hace que la carretera vuelva a parecerse más bien a un camino de cabras como consecuencia de la circulación de las espaladoras.
Y todo pese a que la solución definitiva, que pasa básicamente por una renovación integral del firme de la LE-2603, lleva diseñada sobre el papel desde 2022 –en el anterior mandato– gracias a un proyecto que fue aprobado definitivamente en enero de 2023.
Y fue en octubre de ese año cuando salieron a licitación las obras, que ya están adjudicadas y que a priori se tenían que haber acometido durante la pasada primavera, según explican desde la Junta Vecinal de Redipollos haciéndose eco de los compromisos que les transmitieron entonces desde la Diputación. Sin embargo, las máquinas no llegaron y los baches siguen ahí. «No queremos que pongan más parches, porque incluso los repartidores se niegan a traernos paquetes por no tener que pasar por unos baches que en realidad son socavones y que en algunos casos alcanzan los diez centímetros de profundidad», agregan.
Ahora, desde la institución explican que la renovación de la carretera de Redipollos está pendiente de que se adjudique un contrato que incluye la dirección de obra y la coordinación de seguridad y salud de cinco proyectos previstos en diferentes puntos de la provincia.
Desde el área de Infraestructuras, dirigida en este mandato por el también vicepresidente primero de la Diputación y responsable del Parque Móvil y Productos de León, el leonesista Roberto Aller, apuntan que la adjudicación de dicho contrato está prevista para finales del presente mes de febrero y que, a partir de entonces, el inicio de las obras sólo estaría pendiente de que lo permitan las condiciones meteorológicas.
Se trata de una renovación que supondrá una inversión superior a 277.000 euros (IVA incluido) que tiene un plazo de ejecución de cuatro meses y que servirá para mejorar la seguridad vial.
Actualmente, la carretera presenta un ancho variable con un firme que sufre un importante deterioro superficial y cuya patología más importante es la existencia de cuarteos causados por el agotamiento estructural y el envejecimiento, algo que se agrava todavía más debido a las condiciones climáticas de la zona.
En cuanto al drenaje, las cunetas se encuentran cubiertas de vegetación y cuentan con una sección irregular. Además, los pasos que sirven para salvar dichas cunetas en los cruces de caminos se encuentran deteriorados, no permitiendo un adecuado drenaje. Además, el proyecto detecta que el puente sobre el río Porma presenta una discontinuidad importante con respecto a la plataforma de la carretera, lo que hará necesario actuar en la junta de dilatación mediante la colocación de mortero elástico.
La señalización horizontal se encuentra borrada en los tramos donde existe y la barrera de seguridad existente está en mal estado y resulta insuficiente para garantizar una adecuada seguridad vial.
Mientras, las obras consiste en un refuerzo del firme adaptado al trazado existente, por lo que se mantendrá el ancho variable que se observa en la actualidad. Únicamente se proyecta el ensanche de la carretera en la conocida como curva de 'La Faquina', muy cerrada pero en un p unto con terreno disponible para mejorar la circulación.
Además, se mejorará el drenaje con el perfilado y la limpieza de las cunetas y con nuevos pasos para el cruce de caminos y el acceso a las fincas colindantes. También se mejorará la seguridad de la carretera con la instalación de mayor longitud de barrera de seguridad y la nueva señalización horizontal y vertical.