Ataviados con gorros de papá Noel y sin que faltase una botella de anís para marcar el ritmo, los integrantes de la Coordinadora de León por la Defensa del Sistema Público de Pensiones han expuesto un lunes más sus reivindicaciones en la plaza de Botines. Y lo han hecho a ritmo de villancico.
El principal motivo de la concentración ha vuelto a ser en esta ocasión la exigencia de aseos públicos en la ciudad de León, algo para lo que el presupuesto municipal de 2024 ya incluye una partida de 300.000 euros introducida por el equipo de gobierno a petición de la UPL. En principio, la idea es que se instalen cuatro urinarios con Papalaguinda como ubicación de dos de ellos.
"Y otros dos no sabemos dónde irán. El alcalde ha dicho que en la zona de los mercados. No sabemos dónde irán, pero son cuatro y nos parece que es un princicipio, pero que tenía que haber en todos los parques donde vamos a pasear, a sentarnos y a estar un rato con amigos, con amigas o con nuestros nietos. Pasamos un rato agradable, pero deberían contar con esos aseos públicos que en otras ciudades ya están instalados. No entendemos esa cerrazón para no ponerlos aquí", ha indicado el portavoz de la Coordinadora de León por la Defensa del Sistema Público de Pensiones, Manuel Colinas.
En todo caso, desde la UPL matizan que el planteamiento que han puesto sobre la mesa del equipo de gobierno pasaría por ampliar el número de aseos públicos en función del coste que suponga cada uno de ellos con el objetivo de llegar en 2024 o en ejercicios venideros a los diferentes parques de la ciudad.
En esta ocasión, la reivindicación de los pensionistas ha contado con el respaldo de la Asociación de Enfermos de Crohn y Colitis Ulcerosa, que lleva solicitando también desde hace años la instalación de aseos públicos para no tener que recurrir a establecimientos de hostelería o de comercio para hacer sus necesidades.