Rey: "Lo fácil sería quedarse, pero eso no depende de la Consejería"

El Consejero de Educación, Fernando Rey, bajó este miércoles a la arena para hacer algo que no se acostumbra a ver entre la clase política: escuchar y explicar. «Solo me falta darme una ducha de agua fría» llegó a decir el representante ante las agudas críticas y quejas que la comunidad educativa del Conservatorio de Música de León le trasladó en persona en relación a la mudanza del centro al edificio del Ifycel, anexo al estadio de fútbol Reino de León.

Una reunión que la comunidad educativa había reclamado con carácter previo, es decir, antes de que se anunciaran los planes del Ayuntamiento, que cede el espacio, y de la Junta, responsable de la gestión del centro, ante la negativa de la Diputación de León, la propietaria del inmueble, a renovar el convenio de cesión del mismo, que suponía al año un coste de unos 300.000 euros, según explicó ayer el consejero a preguntas de uno de los docentes. Sinembargo, el consejero argumenta que «una decisión de este tipo no se somete a referéndum porque no es la subasta del pescado».

Fernando Rey: "Una decisión de este tipo no se somete a referéndum porque no es la subasta del pescado" En cualquier caso, el encuentro en el vestíbulo de Santa Nonia 11 fue tenso. Fernando Rey intentó convencer a alumnos, profesores y padres de las bondades de la nueva ubicación mientras la masa social mantenía la defensa de la ubicación actual. «No nos vamos al estadio» fue el cántico unánime que recogió el sentir del cerca de centenar de personas presentes en la reunión. El consejero pudo sentir en su propia piel el rechazo a un traslado contra el que han firmado más de 11.000 personas en la plataforma Change.org.

Entre las quejas trasladadas al consejero durante la reunión varios docentes aludieron al agravio comparativo de la Junta respecto a Burgos o Valladolid, que sí cuentan con edificiosnuevos para albergar sus respectivos conservatorios. La contestación de Rey a estas quejas es transparente: «Os lo voy a decir claro, no tenemos dinero para un Conservatorio nuevo».

Ante ello, una parte de los presentes, entre los que se encontraba la directora del centro, María Jesús Astorga, afirmó comprender la situación delicada de la arcas autonómicas y la falta de la dotación presupuestaria necesaria para acometer la obra de un inmueble de nueva planta. Sin embargo, ante esa imposibilidad mantienen la reivindicación de mantenerse en el centro actual ante lo que el consejero reconoce que «lo fácil sería quedarse, pero eso no depende de la Consejería».

Rey explica que para una vuelta atrás "tendría que haber una voluntad ciudadana extraordinaria" En la misma línea, Fernando Rey deja la puerta abierta a una vuelta atrás en las decisiones de las Administraciones públicas para lo que considera que «tendría que haber una voluntad ciudadana extraordinaria». Sobre la forma de expresión de esa «voluntad ciudadana extraordinaria» el consejero solo puede afirmar «no lo sé, tampoco estoy animando a que los ciudadanos se expresen, no voy a dar, encima, argumentos», como explicó en declaraciones a la prensa posteriores a la reunión.

El consejero tampoco da validez a los argumentos que le trasladó la comunidad educativa, que no le convencieron como el mismo reconoció. Rey mantiene que «la reacción (de los afectados) era hasta cierto punto esperable», puesto que «es un asunto muy importante en la legislatura». De hecho, Rey en persona se ha encargado de la gestión del asunto para mantener el control del problema.

No todo fueron desavenencias en la reunión. En el único punto en el que coincidieron ambas partes fue en la necesidad de «un buen conservatorio mejor que el que tenemos», en palabras de Fernando Rey.

A pesar de los gritos y de las muestras de rechazo, el máximo responsable de Educación de la comunidad no dio su brazo a torcer porque considera que «hay una desproporción», aunque reconoce que instalar un Conservatorio en «los bajos de un estadio, evidentemente, es un disparate, pero muchas de las personas que han estado aquí hoy (por este miércoles) no conocen el espacio». Un espacio que el consejero equipara a «la esquina del Bernabéu».