Las obras de la pérgola bioclimática que el Ayuntamiento de León está construyendo desde el pasado mes de julio en el entorno del Auditorio y de la Delegación Territorial de la Junta avanzan a buen ritmo con el objetivo de que puedan estar terminadas en marzo.
Después de la demora por los problemas iniciales con la documentación necesaria para la redacción del proyecto, los trabajos se han venido desarrollando conforme a la planificación prevista a la hora de mejorar el tránsito peatonal en el tramo de la avenida Reyes Leoneses que discurre entre la plaza de San Marcos y la calle Cruz Roja.
Se trata de unas obras financiadas con los fondos europeos Next Generation que suponen una inversión superior a 1,8 millones de euros y que están sirviendo para instalar una pérgola bioclimática que va a amabilizar un tramo peatonal en el que no hay ni árboles que den sombra ni cornisas que sirvan para guarecerse en los días de lluvia.
El objetivo fundamental de la nueva pérgola, que contará con una cubierta vegetal, es hacer más cómodo el desplazamiento de los peatones que se dirijan hacia el centro de la ciudad desde Eras de Renueva o viceversa. Además, va a ser útil para quienes apuesten por el transporte público, puesto que se habilitará una gran parada de autobuses que funcionará como intercambiador para quienes hayan dejado el coche en el aparcamiento anejo a la Delegación Territorial de la Junta.
En este sentido, el proyecto contempla la reserva de dos carriles, uno por sentido, para los autobuses urbanos. Además, la pérgola contará con sistemas de información a los usuarios en relación a las frecuencias, tiempos de llegada, disponibilidad de aparcamiento en la zona o condiciones ambientales.
Finalmente, el Ayuntamiento instalará una estación de préstamo de bicicletas y un aparcamiento seguro para este tipo de vehículos y también para patinetes en la que pretende convertirse en una gran zona de refugio climático para los peatones que dé también acceso a modos de transportes más sostenibles que el vehículo particular.