Ya están aquí. Se acerca la noche más esperada por niños –y no tan niños– y los Reyes Magos no han querido esperar a última hora para viajar hasta León, quizá para evitar que algún contratiempo inesperado en el trayecto pudiese impedirles la entrega de regalos a quienes se hayan portado bien durante el año que acabamos de dejar atrás y de carbón –de importación, que aquí ya se cerraron las minas– a quienes han sucumbido a la tentación de la travesura.
Melchor, Gaspar y Baltasar fueron recibidos este jueves en El Corte Inglés, a donde llegaron a bordo de a bordo de un suntuoso Rolls Royce Silver Wraith bicolor de los años cuarenta conducido por el chófer real.
Para animar la llegada de los Reyes Magos, sus pajes se adelantaron y, de la mano del grupo Limalimón, ofrecieron a los más pequeños sus mejores consejos para conseguir que se cumplan los deseos que han reflejado en sus cartas.
Sus majestades saludaron a los cientos de niños que se acercaron a los soportales del centro comercial y les recibieron posteriormente en sus tronos para escuchar sus deseos y recoger sus cartas antes de retirarse para preparar los regalos y descansar antes de abordar la intensa agenda que les espera este domingo en infinidad de pueblos y ciudades de la provincia.