San Andrés seguirá en el limbo presupuestario hasta el lunes

Son ya cinco años sin presupuesto los que mantiene el Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo y tendrán que ser al menos cuatro días más porque este jueves toda la oposición se negó a votar las cuentas de 2016 en el pleno celebrado ayer. Era una de las cuestiones que el equipo de gobierno había incluido en los asuntos de urgencia, pero PP, IU, Ciudadanos y UPL se negaron con sus votos a que ni tan siquiera se debatiera puesto que, según aseguraron, los informes les llegaron el martes. 

Era una posibilidad que Gancedo ya preveía puesto que en un momento del pleno aseguró que había "una amenaza" de que la oposición no quisiera aprobar la urgencia, y se confirmó cerca de cuatro horas después del inicio de la sesión. La alcaldesa explicó que el objetivo era aprobar las cuentas lo más rápido posible para que así pudieran entrar en vigor en el mes de abril.

Es más, la regidora daba por hecho que se debería llevar a junta de gobierno, y también preveía convocar el pleno extraordinario el sábado, aunque el secretario le rectificó y le apuntó que debería ser el lunes porque mañana "no es laboral". "No se vaya usted de aquí sin convocarlo", le espetó Gancedo, que tuvo más de un encontronazo con el funcionario durante la sesión.

La alcaldesa no logró por tanto convencer a los demás partidos de la urgencia de votar los presupuestos ayer, por más que destacara que estos días de diferencia servirían para ver en el BOP las cuentas de 2016 más rápidamente, ya que necesitan 15 días de exposición pública para sus alegaciones, aunque Gancedo da por hecho que tendrá que activar el plan b:aprobar las cuentas en junta de gobierno, una disposición que permitió el Gobierno de Mariano Rajoy el año pasado y que fue utilizada por Gregorio Chamorro en el anterior mandato para sacar adelante el plan de ajuste pese a las críticas de la entonces edil socialista en la oposición. 

"No es un capricho, no tenemos tiempo material porque son 68 páginas y nos gustaría contrastarlas con técnicos de nuestra confianza", explicó el portavoz popular. "Cuatro o cinco días después de cinco meses no es para tanto", agregó la edil de IU Laura Fernández. De igual forma se expresaron los ediles de Ciudadanos y UPL, Juan Carlos Fernández y Rosa María Fernández. Que el informe sobre el presupuesto se entregara el martes a la oposición fue justificado por el concejal de Hacienda, Santiago Blanco, en que fue el lunes cuando se conoció el visto bueno del Ministerio de Cristóbal Montoro a las aclaraciones del Ayuntamiento. Pero el edil socialista resaltó durante su intervención que el borrador de los presupuestos "fue entregado en el mes de noviembre", además de que las modificaciones hechas por parte del Gobierno también fueron comunicadas en el mes de enero "al día siguiente de recibirlas".

"De esas 68 páginas, 50 son de antecedentes, porque se incluye el informe de enero", agregó Blanco, que fue secundado por su compañero de equipo de gobierno, Francisco Gómez (PAL-UL), quien señaló que "todos tenían estudiadas las ordenanzas pero sólo PSOE y PALse traen estudiado el presupuesto".

Y es que el pleno ordinario de ayer sirvió para que se debatiera la subida de las plusvalías de los terrenos urbanos y del impuesto para construcción y obras, que de nuevo dejó solo al equipo de gobierno ante la oposición y, por tanto, fueron ambas medidas rechazadas. Una suponía un incremento del 2% y otra del 0,06% y se debían, según Blanco y Gancedo, a la necesidad de cumplir con el plan de ajuste aprobado en el anterior mandato y, por tanto, "con la ley". Pero la oposición se negó a aceptar estas subidas puesto quesuponía "un perjuicio para los ciudadanos". Blanco subrayó que el incremento en los ingresos del Ayuntamiento serían en el caso del impuesto de 15.000 euros y de las plusvalías de 11.000 euros.

La única medida de calado que se aprobó ayer, y eso que se hizo mediante urgencia (también con polémica, porque los cuatro ediles de IU abandonaron el pleno durante la primera votación y se contabilizaron como abstenciones), fue el pago de las nóminas del mes de marzo a los trabajadores municipales. Los votos a favor del PSOE y las abstenciones de UPL, Ciudadanos y PAL, además de las del grupo de Eloína Terrón, así lo permitieron. La causa volvió a ser, como en febrero, que el equipo de gobierno es el competente para aprobar el pago de las mensualidades antes que el pleno.