Tras dar parte a la autoridad se avisó a las familias antes de proceder a reparar los desperfectos En uno de los casos se había movido una lápida y se habían sacado unas cenizas que, eso sí, fueron depositadas sobre la tumba. En total, según informaban ayer fuentes de Serfunle, se habrían abierto al menos cuatro o cinco sepulturas y dos de ellas fueron manipuladas, un hecho que, tal y como aseguraban, no habían visto jamás en el cementerio leonés trabajadores que suman ya más de un cuarto de siglo de servicio.
Inmediatamente se dio aviso de lo sucedido y se personó en el lugar la Policía Local y la Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía, que continúa trabajando para esclarecer lo sucedido, que coincidía prácticamente en el tiempo con un hecho similar en la localidad salmantina de Peñaranda de Bracamonte, concretamente en uno de los panteones más conocidos del camposanto local, perteneciente a una conocida familia, que habría sido asaltado tras romper los ventanales.
Más seguridad
Puesto en conocimiento de las autoridades, desde el cementerio leonés se procedía asimismo a avisar a las familias de las sepulturas afectadas para que pudieran comprobar lo sucedido antes de dar paso a la reparación de los desperfectos ocasionados.
Además, informan de que a raíz de estos hechos se ha incrementado la seguridad en el camposanto de la capital durante el horario nocturno para evitar que se repitan incidentes como el relatado. Aunque en un primer momento se sospechó que el objetivo de los profanadores podrían ser las joyas, parece descartarse al considerar que las sepulturas objeto de los ataques no eran aparentemente las que más botín les podían proporcionar.