El segundo trimestre del año no fue positivo en términos de empleo para la provincia. En relación a abril-junio de 2023 este repuntó en 3.400 personas hasta alcanzar la cifra de 20.100 integrantes en sus listas y, respecto a los primeros tres meses de este ejercicio, el desempleo también subió, en este caso hasta un 20,36 por ciento. Estos son algunos de los datos que se pueden extraer de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y que los sindicatos valoraron como negativa. «Nada que celebrar», resumieron desde UGT, lamentando que León sigue «arrastrando» los «peores» números y considerando que estos «deben sonrojar a los responsables políticos». «Seguimos teniendo la peor tasa de actividad de España junto con Orense», recordaron, del 48,58 por ciento, «siendo las mujeres las más castigadas». Desde UGT señalaron directamente a la Junta y a sus políticas activas de empleo como responsable, afirmando que «han sido un absoluto fracaso» y remarcando que «si no hay un cambio de rumbo», León seguirá en «la senda del olvido». «Cada nuevo dato estadístico es un chute de energía para convocar a la ciudadanía a manifestarse por el futuro de nuestra tierra», advirtieron.
Desde CCOO alertaron por su parte de la pérdida de tejido productivo, «especialmente el industrial, así como la excesiva dependencia de un sector servicios que ofrece unas condiciones de precariedad y temporalidad». Esto, en su opinión «genera un caldo de cultivo para la inestabilidad laboral, que fomentan el éxodo de población en busca de más oportunidades y mejores condiciones de trabajo». Asimismo, pusieron el foco en «las enormes dificultades de las zonas rurales, con recortes de servicios y carencias de infraestructuras», que «dificultan fijar población, provocando la pérdida de gente joven y acelerando el envejecimiento, con un descenso demográfico vertiginoso». La secretaria general de CCOO León, Elena Blasco Martín, también llamó la atención sobre «la precariedad laboral» e insistió en la necesidad de apostar «por una medida de choque y de urgencia, agrupada en un Plan de Emergencia de Inversión Pública».
La Federación Leonesa de Empresarios (Fele) también vio los datos de la EPA como «preocupantes», puesto que reflejan «una disminución en la actividad económica y que existen menos personas en edad de trabajar participando en el mercado de trabajo». La Federación recordó la «importancia» del Diálogo Social «como una herramienta clave que ha demostrado ser fundamental para avanzar en medidas laborales, económicas y sociales que ayudan al mantenimiento y la creación de empleo» y advirtieron que el caso contrario «supone obstaculizar la labor empresarial».
Desde el Círculo Empresarial Leonés (CEL) consideraron que «León vuelve a ser un caso singular y preocupante en el panorama nacional, ya que los datos que arroja la EPA contrastan con el comportamiento especialmente positivo del mercado laboral en el conjunto de España, donde se alcanzaron niveles máximos de ocupación, población activa y trabajadores en el sector privado».
De hecho, advirtieron, «León vuelve a estar en el vagón de cola en cuanto a tasa de actividad, que ha bajado al 48,5 por ciento cuando hace un año habíamos logrado subirla hasta el 51,11 por ciento». Los empresarios del CEL hicieron hincapié en que el segundo trimestre del año «es uno de los mejores para el mercado laboral», aunque «los datos de la EPA no corroboran esa premisa y añaden elementos de preocupación e incertidumbre respecto a la fortaleza de la recuperación económica». «Para recuperar el dinamismo del sector privado es importante superar la parálisis política y mejorar el clima de negocio, que cada vez es más nocivo y merma la competitividad de las empresas», zanjaron.