La incertidumbre económica y la espiral inflacionista, que se ha mitigado en sus cifras generales pero que sigue afectando notablemente a productos básicos como los alimentos, han supuesto un nuevo descalabro del mercado de trabajo. Ni siquiera las contrataciones del verano han podido evitarlo una vez que se han acabado las vacaciones. Así se deduce al menos de la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al tercer trimestre del año y publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Cabe destacar en primer lugar que se observa un ligero descenso en el número de personas activas que hay en la provincia. Se trata de aquellas que son mayores de 16 años y que están en disposición de trabajar con independencia de que en este momento lo estén haciendo o se encuentren en el paro. El dato conocido este jueves refleja 199.400 activos, lo que supone la pérdida de 600 con respecto al segundo y de7.700 si se compara con el registrado hace justamente un año (207.100). La tasa de actividad de la población se sitúa en el 51,15%. Es el segundo dato más bajo del país sólo por detrás de Orense (48,97%).
Dentro de los activos se encuentran los ocupados, que son los que tienen un puesto de trabajo. El dato anotado en el tercer trimestre se sitúa en un total de 178.600. Son 2.900 menos que en el anterior (181.500) y 9.000 menos que hace un año (187.600). De ello se deduce que la economía leonesa destruyó una media casi 32 puestos de trabajo cada día entre julio y septiembre y de casi 25 en el último año.
Con estos datos sobre la mesa, la tasa de empleo se sitúa en un 45,83% frente al 46,39% de junio o el 48% de hace justamente un año. El panorama ha cambiado radicalmente, puesto que entonces estábamos hablando de que la tasa de empleo registraba el dato más alto de la serie histórica que ofrece el INE y que arranca hace dos décadas.
Sectores de actividad
Por sectores de actividad, los peores parados son los servicios y la construcción, que pierden ocupados tanto en la comparativa trimestral como en la interanual. En el caso concreto de los servicios, la cifra actual se sitúa en 134.100, lo que supone la pérdida de 4.800 puestos de trabajo con respecto a junio y de 9.700 durante los últimos doce meses, ya que en el tercer trimestre de 2022 había 143.800 ocupados en el sector servicios de la provincia. El final de la campaña de verano y de sus contrataciones de refuerzo tiene siempre mucho que ver en los datos de este trimestre.
Y en el caso de la construcción, el número de trabajadores se sitúa en 11.200, dato que supone un descenso de 3.000 con respecto al segundo trimestre del año y de 3.900 en los últimos doce meses.
Mientras, la agricultura recupera ocupados entre julio y septiembre, ya que la cifra total llega a 8.500 tras un aumento de 1.100 con respecto a la EPA del segundo trimestre. Sin embargo, el campo leonés pierde cien empleos con respecto al dato conocido hace un año.
Finalmente, el sector productivo que ha experimentado un mejor comportamiento en la provincia de León es sin lugar a dudas la industria. Son ya 24.800 las personas ocupadas, lo que supone un incremento de 3.800 sólo entre julio y septiembre y de 4.600 si establecemos la comparativa interanual.
Y dentro de los activos de los que hablábamos al principio están también los parados. La EPA del tercer trimestre los cifra en un total de 20.800 tras un aumento de 2.300 con respecto al anterior (18.500) y de 1.300 en comparación con el dato de hace un año (19.500). La tasa de paro sube hasta el 10,41% frente al 9,24% de hace tres meses y el 9,41% de hace un año.
Es necesario referirse ahora a las personas inactivas, es decir a quienes son mayores de 16 años pero no están en disposición de trabajar. Se trata de estudiantes, pensionistas y personas que tienen reconocida una incapacidad permanente o que se dedican a las labores de su propio hogar.
Este colectivo contaba al cierre del tercer trimestre del año con 190.400 integrantes, lo que supone un descenso de 900 con respecto al mes de junio y un aumento de 6.600 en comparación con el dato conocido hace un año.
Menos estudiantes, más jubilados
Dentro de los inactivos, destacan en la vertiente negativa los datos referidos a estudiantes (22.800 tras un descenso de 2.700 en tres meses y de 600 en un año). Mientras, crece el número de jubilados o pensionistas, que se sitúan en 114.900 tras un incremento de 4.800 en el último trimestre y de 2.900 en un año. En cuanto a las personas con una incapacidad permanente, la cifra es de 10.200, lo que supone 3.400 menos que en junio y 1.600 más que hace un año. Finalmente, bajan las personas que se dedican a las labores del hogar hasta situarse en 36.200 tras registrarse un descenso de 2.200 con respecto al segundo trimestre y de 100 en el último año. Finalmente, las personas que son inactivas por otras causas son 6.200, es decir, 2.500 más que hace tres meses y 2.900 más que hace un año.
Una EPA que, en definitiva, sigue dejando la pérdida de población y la baja tasa de actividad como principales problemas, aunque ello no impide por ahora el tirón de la industria en una economía en la que siguen predominando los servicios y la habitual estacionalidad de sus contrataciones.