Un interno de Mansilla se intenta suicidar prendiendo fuego a su celda

Los funcionarios del Centro Penitenciario de Mansilla de las Mulas salvaron este viernes la vida a un interno que intentó suicidarse prendiendo fuego a su propia celda.

Según señala CSIF, el suceso se produjo "en el Módulo 4 hacia las 20.00 horas cuando un interno incendió las mantas y el colchón de su celda y los apoyó en la puerta de la misma para evitar que se pudiera abrir. Personados los funcionarios, consiguieron abrir la puerta después de mucho trabajo, sofocar el fuego con los extintores y sacar al interno de la celda para trasladarlo a la enfermería, tarea ésta complicada puesto que el interno se negaba a salir y solamente decía que quería morir".

Así, afirman que "una vez visto por los servicios médicos y ante las continuas amenazas del interno de quitarse la vida, se le trasladó a una celda especial con vigilancia permanente de un interno de apoyo". Además, lo ocurrido "provocó gran cantidad de humo en la galería del Módulo 4, no siendo necesario evacuar a ningún otro interno por el escaso número de ellos que alberga dicho Departamento".

CSIF desvela que el autor del incendio "es el último interno que queda en el Centro Penitenciario de los que protagonizaron el incidente el pasado martes en el Módulo 10, cuando varios mandos de la prisión junto con algunos funcionarios fueron retenidos durante casi una hora por los internos, con el resultado un funcionario herido por una agresión".

No ha sido el único incidente en estos días, ya que afirman que "el mismo viernes al mediodía, hubo que aislar a cinco internos del Módulo 14 (otro de los más conflictivos) por una pelea entre ellos con el resultado de pequeñas lesiones en alguno de ellos. En esta ocasión los funcionarios contaron con ayuda de otros internos para separar a los que se estaban peleando".

Desde CSIF quieren señalar "la rapidez y eficacia de los funcionarios en solucionar ambos incidentes, lo que viene a demostrar la profesionalidad de la plantilla que, si bien es de una edad avanzada, lo compensa con una veteranía y profesionalidad que se ve reflejada en la solución de los conflictos, siempre y cuando se la deje trabajar. Estos incidentes vienen a demostrar que la situación en el Centro Penitenciario dista mucho de ser "de normalidad" y en CSIF la calificaríamos, como mucho, de "calma tensa".

Desde CSIF reiteran su "invitación a la Delegada del Gobierno para que visite la prisión y vea como trabajamos los funcionarios de prisiones y recabe información de primera mano para hacerse una idea de las condiciones en las que realizamos nuestro trabajo, no en vano es la representante del Gobierno Central en la Comunidad Autónoma de Castilla y León y por ende máxima autoridad de los trabajadores de la Administración General del Estado".

Por último CSIF reitera "la petición "a quien corresponda", para que los trabajadores penitenciarios tengamos la consideración de "agentes de la autoridad", consideración que nos ayudaría mucho en el desempeño de nuestra labor. No deja de ser una incongruencia que en una prisión los encargados de mantener el orden y la seguridad necesarios para poder cumplir el mandato constitucional de la "reeducación y reinserción social de los internos" (Art. 25 de la Constitución), no tengan dicha consideración de agentes de la autoridad".