Un retablo salvado del paso del tiempo en Valencia de Don Juan

Allá por febrero el altar mayor de la Iglesia de San Pedro de Valencia de Don Juan desapareció entre los andamios. No era una desaparición desafortunada como aquella que tuvo el conjunto artístico en el siglo XIX cuando fue a parar a una panera de la ciudad coyantina y a resultas de lo cual faltan varias piezas. Esta era una desaparición premeditada y de gran necesidad para su conservación. Comenzaron entonces las tareas de restauración del retablo de El Salvador, un conjunto de tallas, columnas y relieves que pertenecían a la iglesia del mismo nombre hoy ya desaparecida.

Esos andamios ayer dieron paso a un retablo mucho más limpio, más brillante, con las zonas más dañadas reconstruidas y con un relieve en su parte central en el que descansar el ojo entre tanto dorado. Han sido las manos de Amancio González, con la ayuda de José Luis Lonjos, las que han hecho una revisión de la ‘Transfiguración de Jesús’, de Rafael. En su lugar estaba antes otro relieve de la empresa zaragozana Estudios de Arte Urdariz, encargada de la última restauración hasta ahora en 1950.El original se perdió en el trajín del cambio de una iglesia a otra y a su paso por aquella panera. Para Amancio González esta obra ha supuesto un «doble reto» ya que según él mismo explicó ayer en Valencia de Don Juan, no suele trabajar el volumen y además está acostumbrado a trabajar en su propia visión escultórica. En este caso ha tenido que reinterpretar a Rafael lo cual le ha resultado «una experiencia muy positiva» aunque reconoce que le preocupaba «la gama cromática, el poder asentar esos colores del cuadro aquí».

El entallador del retablo original esGuillermo Doncel, una obra que fue encargada en 1543 y de «gran valor artístico».De su restauración se ha encargado el Taller Diocesano de León, cuya responsable, Marta Eva Castellanos, acudió también ayer a la inauguración del mismo y quien afirmó que las tareas han sido más bien de «tratamiento epidérmico y con técnicas al uso».«La restauración no ha sido de lo más técnico que hemos hecho ya que la técnica del autor era exquisita y el momento conservativo era bueno a pesar de todas las vicisitudes que ha pasado el retablo se conservaba bien», explicó. Son esas vicisitudes la que según ella han podido salvarlo ya que hay restos de galerías de termitas en su interior procedentes de la primera iglesia que lo albergó y de haber seguido allí, probablemente, ahora el retablo estaría peor conservado.

Salvador Valbuena, párroco de Valencia de Don Juan, se mostraba ayer entusiasmado con el hecho de tener el retablo arreglado. «Se ha cumplido mi gran ilusión de arreglarlo», comentó. La parroquia ha invertido «unos 94.000 euros», dinero procedente de los donativos de los feligreses tanto de la localidad como asturianos, según el mismo párroco explicó durante su intervención.

El Obispo de León, Julián López, acudió también ayer a contemplar el lavado de cara del retablo, al igual que el alcalde y recién estrenado presidente de la Diputación, Juan Martínez Majo. Ambos mostraron su satisfacción con los resultados en sus intervenciones. Además, Julián López hizo mención a la posibilidad de que Valencia de Don Juan acoja en un futuro las Edades del Hombre, algo que según él «supone un reto importante para la Diócesis de León».