Una jornada para conocer y dar futuro al Camino Olvidado a Santiago

La Asociación Leonesa del Camino Olvidado a Santiago y el Grupo de Acción Local Cuatro Valles organizan una jornada divulgativa sobre el Camino Olvidado a Santiago, que se celebrará el próximo 17 de mayo, en el edificio de usos múltiples de la Mancomunidad de Municipios Omaña-Luna –ubicado en Avenida Manocho, 92 de la localidad de Canales-La Magdalena-.

La celebración de este evento pretende sumar una iniciativa más a las muchas de las que, desde diferentes entidades y colectivos, se vienen desarrollando en los últimos años para dar a conocer el Camino Olvidado en todo el territorio por el que transcurre y recoger las sugerencias y colaboraciones que se propongan, ya que pretende ir más allá de lo puramente promocional y busca ser un espacio de encuentro entre todos los implicados en el proyecto de recuperación de esta ruta jacobea.

El programa previsto comenzará a las 11:00 con la inauguración a cargo de la Asociación Leonesa del Camino Olvidado a Santiago. Unos quince minutos después, se abordará el Camino Olvidado a Santiago, el proyecto de cooperación Leader de los Grupos de Acción Local (GAL) Montaña de Riaño, Cuatro Valles y Asodebi. Las 11:30 horas darán paso a la charla ‘El trazado del Camino Olvidado a Santiago en la provincia de León’ que imparte José Antonio Cuñarro. Tras la charla, en torno a las 11:45 horas, llegará el momento de abordar las propuestas de colaboración y actuaciones para el año Xacobeo 2022. Los ruegos y preguntas darán paso, a las 12:20 horas, al acto de clausura.

El Camino Olvidado, también conocido popularmente como Camino Viejo o Camin Vieyu fue utilizado por los peregrinos entre los siglos IX y XII. Se cree que es una de las rutas jacobeas de mayor antigüedad junto al Camino Primitivo. La situación de los reinos cristianos hizo que el Camino Olvidado fuera frecuentado entre los siglos IX y XII y más seguro ante los ataques de las tropas musulmanas. Se cree que fue muy utilizado hasta el momento en el que los reinos cristianos consolidaron la frontera con los musulmanes al sur del Duero y el rey Alfonso VI, conquistador de Toledo, promovía el Camino Francés de la mano de los monjes de Cluny. Una gran parte de su trazado discurre por los valles meridionales de la Cordillera Cantábrica, entre Bilbao y hasta llegar al Bierzo, donde se une al camino Francés para proseguir juntos a Compostela.