Una médica del Hospital se enfrenta a 2.400 € de multa por un diagnóstico erróneo

Una médica del Hospital de León se enfrenta a una multa de 2.400 euros y seis meses de inhabilitación acusada de un delito de lesiones por imprudencia profesional grave.

La denunciante es una mujer de 64 años que la noche del 9 de abril de 2012 acudió al servicio de Urgencias del Complejo Asistencial de la capital leonesa tras sufrir una caída en su domicilio. Allí fue atendida, en segunda instancia, por la acusada, que determinó que se le hicieran dos radiografías del hombro derecho diagnosticando «erróneamente», dice el fiscal, una tendinitis de rotadores poniéndole un tratamiento. Semanas después, la denunciante fue a su médico de cabecera que, a su vez, le remitió al especialista que le diagnostica una luxación glenohumeral inveterada –aquellas que han permanecido sin diagnosticar al menos tres semanas– de hombro derecho irreductible.

El forense cree que se interpretaron mal las placas, que el diagnóstico fue erróneo y por ello le han quedado secuelasEl médico forense considera que la exploración radiológica que le efectuaron a la denunciante aquella noche en Urgencias mostraba la luxación en el hombro y que habría sido diagnosticada erróneamente con una mala interpretación de los datos de las placas por parte de la doctora, lo que ha derivado en que la víctima tenga secuelas.

Los hechos, dice el Ministerio Público, serían constitutivos de un delito de lesiones por imprudencia profesional grave, y entiende que procede imponer a la acusada una pena de ocho meses de multa con una cuota diaria de diez euros (2.400 euros) y la inhabilitación para el ejercicio de su profesión durante medio año. Asimismo, la médica y la compañía aseguradora que, a fecha de los hechos en la que ésta prestaba servicios para el Sacyl como MIR de tercer año cubría su responsabilidad civil, tendrán que indemnizar a la víctima en 986 euros por los días que estuvo incapacitada, en 527 por los días de curación y en 3.650 euros por las secuelas.

La defensa de la doctora argumenta que la médica revisó los resultados de la radiografía, pero que no eran «muy determinantes dada la actitud poco colaboradora de la paciente al someterse a su realización por el estado de importante intoxicación etílica que presentaba». Por ello, y atendiendo al examen físico que le habría hecho otro médico antes de que ella la viera le diagnosticó una tendinitis. Según la representación legal de la acusada no existe delito alguno y pide, por tanto, la libre absolución de la procesada.

El juicio está señalado para el próximo 13 de marzo en el Juzgado de loPenal número 2 de León a partir de las 11:30 horas.