Los primeros fríos son ideales para degustar el resultado de una receta contundente y con poco secreto a pesar de que cada establecimiento participante tiene el suyo ya que es imposible encontrar dos iguales. Las texturas, los sabores y el color cambian de unos cocineros a otros, unas peculiaridades que obligan al visitante a probar más de un bocado en busca del más o el menos picante y en definitiva, de la mejor Tapa de Ajo.
Aunque todos empleen (o eso dicen) prácticamente los mismos alimentos, el resultado varía de manera notable de unos fogones a otros Por ello mañana a partir de las 12:00 horas, las puertas del Ayuntamiento de Santa María del Páramo se convertirán en un improvisado comedor en el que vecinos y visitantes podrán degustar las tapas de 16 establecimientos diferentes de la localidad. La mañana del domingo, el día de más trajín en el municipio puesto que es el popular mercado semanal, estará este 1 de noviembre acompañada también por la gastronomía más autóctona del Páramo. Desde el Consistorio de Santa María estiman que cada año se pueden llegar a servir unos 50 kilos de este plato, repartidos en unas 2000 raciones.
Los establecimientos participantes son La Montañesa, Olimpo, Avenida, El Silo, la Estación de Autobuses, La Fuente, el Novel, la Zíngara, el Derby, al tapería Kenedy, el bar el Circuito, la Taberna de Tano, Mesón el Campesino, la cafetería la Sirena, el Bar de las Piscinas y la cafetería Gastby.
La receta
‘Cada maestrillo tiene su librillo’ y cada cocinero pone en marcha sus propios trucos a la hora de cocinar la Tapa de Ajo. De ahí que aunque todos empleen (o eso dicen) prácticamente los mismos alimentos, el resultado varía de manera notable de unos fogones a otros. La base de la receta de la Tapa de Ajo es un caldo, que bien puede ser de huesos de gallina o de vaca, con morcillo, lacón, tocino y costillas. A continuación se espesa a base de la miga de pan de una hogaza, a poder ser del día anterior. Después no puede faltar el aceite de oliva, la salazón al gusto, el pimentón para darle color y alegría, y por supuesto el ajo, ingrediente que dota al plato de consistencia y sabor.
Este plato puede servirse como aperitivo sobre una rebanada de pan o como acompañamiento de carnes y pescados y a pesar de que mañana se homenajea a este típico plato, cualquier día del invierno es bueno para acercarse a Santa María del Páramo para probarlo ya es habitual encontrarlo como tapa en los bares.