UPL intentará gobernar en solitario en San Andrés

Unión del Pueblo Leonés quiere gobernar San Andrés del Rabanedo en solitario. Así lo ha confirmado a La Nueva Crónica la candidata de UPL en el municipio, Ana María Fernández Caurel, ganadora de las elecciones municipales del 28 de mayo. Los seis concejales conseguidos por la formación leonesista con el 25,6% de los apoyos totales, colocan al partido leonesista en una posición privilegiada para formar gobierno y la intención de Fernández Caurel, a fecha de 1 de junio al menos, es gobernar en solitario. 

"Lo normal es que dejen gobernar a la lista más votada, por lo que no valoro ningún pacto", ha explicado la candidata a la alcaldía. "Si los ciudadanos han decidido que seamos la lista más votada, los demás tendrán que valorarlo", ha añadido Fernández Caurel. El miércoles, se reunió el Consejo General de UPL para decidir la postura del partido ante los pactos de los principales enclaves de la provincia que se plantea UPL, como son San Andrés, Villaquilambre, León y la Diputación. 

Sin conocer aún más detalles sobre las posiciones que tomó el órgano principal del partido, sí se sabe ya que la candidata en San Andrés no ha hablado con ninguna fuerza política de cara a posibles pactos. "Tenemos la oportunidad de conseguir la primera alcaldía en San Andrés y tenemos que aprovecharlo", afirmó Fernández Caurel, porque además, "a UPL los pactos no le han ido bien", concluyó. 

Estas declaraciones de UPL han tenido lugar este jueves, una vez se ha conocido un error detectado por el PP en la mesa electoral del barrio de La Sal, que quitaría un escaño al PSOE para dárselo al PP, por un margen de 23 votos. De esta forma y a la espera de los resultados definitivos que se publicarán este viernes, UPL y PP empatarían en seis escaños finalmente, aunque los leonesistas mantendrían su posición como partido ganador de los elecciones.

La postura de Fernández Caurel ante el cambio de escaños es que, a UPL, "no le influye", por lo que reafirma su intención de tomar el bastón de mando sin pactos políticos. Algo que, "por supuesto", no implica que "se entenderá con todo el mundo" para pactos presupuestarios y otras medidas.