La Unión del Pueblo Leonés reclamó este sábado a la Confederación Hidrográfica del Duero que cumpla con sus competencias y obligaciones y recordó que entre las mismas se encuentra el control del dominio público hidráulico, así como de manera específica el mantenimiento y cuidado de los cauces de los ríos y canales, “lo que se incumple reiteradamente”.
Ante la tragedia provocada por fenómenos naturales como la reciente Dana, señala la formación, han saltado las alarmas respecto al estado de los cauces de los ríos y canales, toda vez que una eficiente limpieza de los mismos es determinante en esas lamentables situaciones. Añaden que desde hace años se pide a la Confederación Hidrográfica del Duero por parte de ayuntamientos y juntas vecinales de la provincia que cumpla con sus atribuciones de tener limpios los cauces de los ríos de la maleza existente, así como el buen estado de los canales y sus desagües, “siendo lo cierto que ni actúan eficientemente en ese sentido ni permiten que sean los propios ayuntamientos y juntas vecinales quienes realicen esas funciones necesarias pese a no corresponderles”.
También aluden a la existencia de rebosamientos del canal del río Esla en Algadefe debido a un mal mantenimiento achacable a la misma Confederación Hidrográfica y a la situación del cauce del río Torío a su paso por León, en el barrio de Puente Castro, donde la maleza “es algo exagerado e impide casi ver el río y el propio puente que lo atraviesa, con el claro peligro que se puede producir en caso de una crecida del río”.
Como ejemplo de lo que tildan de “inoperancia” mencionan que el pasado verano la Junta Vecinal de Remolina, perteneciente al Ayuntamiento de Crémenes, procedió a arreglar y dejar en buen estado una pista que es muy utilizada por los vecinos tanto para desplazamiento del ganado como acceso al coto de este pueblo. Recientemente, hace poco más de un mes, como consecuencia de las fuertes riadas provocadas por la borrasca Kirk, esa pista quedó inservible. El hecho relevante, apuntan, es que esta situación se agravó considerablemente debido a la maleza y arbustos que existen en el cauce del río que discurre junto a este camino y que “por la desidia de la Confederación Hidrográfica del Duero que ni limpiaron ni permitieron la limpieza del cauce han sido responsables del fatal resultado de esa situación”.
Aseguran que hay otros ejemplos de esta inactividad por parte de la Confederación que han provocado serios daños, como el desbordamiento del río Bernesga a su paso por León que se produjo a finales del 2019, que causó cuantiosos daños en diversas infraestructuras como pasarelas, puentes y calles, y que costó más de 200.000 euros al Ayuntamiento. “Sin duda alguna, si el cauce del río hubiera estado lo suficientemente limpio esos daños hubieran sido mucho menores”, afirma el secretario de Infraestructuras de la formación, Enrique Valdeón.