Un bulto de 10kg de objetos personales a la espalda, dos mochilas cargadas -cada una- con unos 23kg de equipo humanitario y un carácter necesariamente altruista visten a los voluntarios que este 2024 se embarcan en un viaje al poblado senegalés de Niague, localizado en el este de su capital, Dakar. Una decena de kilos con objetos personales y poco menos de cinco decenas de material que dan cuenta de las intenciones de quienes se los cargan al lomo, dispuestos a cruzar el Estrecho en dirección al continente africano.
Senegal ocupa el puesto 162 de los 188 países en el Índice de Desarrollo Humano. Casi la mitad de su población vive por debajo del umbral de pobreza y un 30’8% lo hace en situación de pobreza absoluta. Poco menos de 200.000km de extensión, más de 16 millones de habitantes de gran variedad étnica, una esperanza de vida que no alcanza los 70 años, altos niveles de fertilidad, una edad media de 19 años y un reducido gasto público en salud conforman el carácter de este país del África Occidental.
Los voluntarios se dividirán en dos grupos distintos que permanecerán en Niague durante toda una quincena
A sabiendas de tales condiciones, nacía en 2017 un proyecto solidario que en 2024 sumará un total de tres viajes de voluntariado. Asmun ‘Solidarios por el mundo’ se fraguaba en el seno de una entidad empresarial por iniciativa de su voluntariado social corporativo. Así lo explican los cuatro leoneses que viajarán hasta el pequeño pueblo de Niague en el año venidero. Cuatro de los 80 voluntarios que ya se han comprometido a realizar el mismo trayecto. Algunos, en la primera semana del próximo mes de febrero; otros, cogiendo el relevo de ese primer grupo para continuar con su actividad.
«Nuestro objetivo va dirigido en dos vías», cuenta Ángeles, fisioterapeuta leonesa y voluntaria en Asmun. Para explicarlas, la leonesa hace referencia a una escuela de unos 800 alumnos que tienen por lavabos «dos letrinas: una para niños y otra para niñas». «Por otra parte», continúa: «Vamos a colaborar en un centro de salud, donde atenderemos a los pacientes». Educación y sanidad son el grueso de la labor de esta ONG, que plantea igualmente la elaboración de una serie de talleres para enseñar nociones «que para nosotros son muy básicas y, para ellos, son fundamentales», como el tratamiento de enfermos, heridos o afectados por golpes u otras lesiones.
El acercamiento de un grupo de orientación y psicología a la población de Niague, la instalación de un circuito eléctrico en una de las aulas de su escuela o trabajos de rehabilitación de la misma se suman a actividades ya realizadas por esta organización, como el proyecto ‘Somos Vision’ en colaboración con VisionLab y VisionNix para la diagnosis telemática de problemas oculares. También a otras por realizar, como los ‘Desayunos solidarios’, que parten de la premisa de que «no habrá ningún niño o niña que asista a la escuela sin desayunar», o el proyecto ‘Niñ@s Talibés’, que pretende no sólo atender necesidades básicas de menores forzados a mendigar dinero o comida; también asegurar una continuidad a las medidas que se adopten. «Se ha unido recientemente un chef de Madrid que tiene una escuela de cocina en Vallecas», añade María, enfermera voluntaria en la organización: «Se llevarán unas cocinas hechas con carbón y aluminio para enseñarles a cocinar en unas condiciones mínimas».
Se espera recaudar más de 3.500kg de equipo, frente a los 2.000kg recaudados durante la última campaña
Crecimiento exponencial
María, igual que Ángeles, la docente Azucena y el médico de la Cultural, Salus, son los únicos leoneses del total de 80 voluntarios que se suman al último viaje programado por Asmun. Los números les hacen hablar de un «crecimiento exponencial», pues en la última campaña colaboraron la mitad de personas, llegando a cosechar en una semana 1.520 pacientes de medicina familiar, 1.710 asistencias sanitarias, 114 asistencias de fisioterapia y 170 oftalmológicas en términos de sanidad. En la rama educacional, cuatro aulas fueron rehabilitadas, se concedieron 2.200 desayunos solitarios y se elaboraron talleres de prevención y rescate, además de otras labores de docencia. El número total de niños talibés atendidos fue 60 y los voluntarios acudieron cargados con 2.000kg de equipo humanitario.
Para la campaña de 2024, los voluntarios leoneses ya dilucidan una recaudación aproximada de 900kg, con vistas a alcanzar más de 3.500kg en total. «Absolutamente todo lo que se recaude va a llegar de nosotros», afirman: «No se quedará nada por el camino ni habrá costes sobreañadidos, que es el problema, muchas veces, de las grandes organizaciones». Los propios voluntarios se costean el viaje y la estancia, que coincide con su periodo vacacional, y animan a instituciones y particulares a que unan fuerzas para seguir recaudando y ampliar su voluntariado, abierto a toda clase de personas por cuotas anuales de 20 a 50 euros. «Aunque sea una caja de paracetamol, todo suma», terminan por decir.